La disminución de camas hospitalarias en los 5 principales hospitales de Córdoba es del 57,7%. Muchos servicios importantes como UTI, quirófanos y laboratorios están cerrados o funcionando parcialmente. También se destinaron camas y espacios a oficinas e investigadores privados en lugar de pacientes. La falta de mantenimiento e insumos pone en riesgo la atención y vida de pacientes.