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Dispositivo de resonancia magnética funcional para examinar la activación cerebral
relacionada con el stepping
Martín Martínez (miembro del IEEE), Federico Villagra, Francis Loayza, Marta Vidorreta, Gonzalo Arrondo, Elkin
Louis, Javier Díaz, Mikel Echeverría, María A. Fernández-Seara, María A. Pastor*
Resumen- Los movimientos repetitivos y alternantes de las extremidades inferiores (stepping) son un componente específico
de la marcha humana. Debido a dificultades técnicas, los mecanismos neurales responsables de tales movimientos no han sido
estudiados previamente con resonancia magnética funcional (RMf).
En este estudio, se presenta un nuevo dispositivo de marcha empleado para investigar la cinemática y la patrones de
activación cerebral involucrados en los movimientos alternantes y repetitivos de las extremidades inferiores. Una vez dentro
del escáner, diecinueve sujetos sanos fueron guiados por dos señales visuales e instruidos para realizar una tarea motora que
involucró movimientos repetitivos y alternantes de ambos miembros inferiores, mientras cada sujeto seleccionaba una
amplitud cómoda. El dispositivo permite un movimiento coordinado a la vez que registra los desplazamientos concurrentes, lo
cual permite cuantificar algunas de las características cinemáticas primarias del movimiento, como amplitud y frecuencia.
La actividad cerebral relacionada con los movimientos de las piernas se corresponde con una red bilateral que incluye la
corteza sensorimotora primaria y secundaria, área motora suplementaria, corteza premotora, corteza prefrontal, lóbulo
parietal superior e inferior, putamen y cerebelo, regiones que son conocidas por su participación en el control motor del tren
inferior.
Activaciones cerebrales relacionadas con la amplitud del movimiento de las piernas fueron identificadas en una red
lateralizada al lado derecho que incluye al estriado y regiones extra-estriatales y fronto-parietales.
Palabras clave: locomoción, resonancia magnética funcional, movimientos de piernas.
Transcripción del autor: Martinez, M., Villagra, F., Loayza, F., Vidorreta, M., Arrondo, G., Luis, E., ... & Pastor, M. A. (2014). MRI-
Compatible Device for Examining Brain Activation Related to Stepping. IEEE transactions on medical imaging, 33(5), 1044-1053.
1. Introducción:
La locomoción humana es una tarea sensorimotora compleja que implica la interacción dinámica de músculos que actúan
sobre diferentes articulaciones de las extremidades, generadores locomotores espinales y una red jerárquica coordinada por
estructuras nerviosas distribuidas a lo largo del tronco-encéfalo, cerebelo, ganglios basales y corteza cerebral. Esta red controla
el movimiento y el equilibrio mediante una integración de información multisensorial que permite adaptar nuestro patrón
locomotor con precisión, velocidad y versatilidad extraordinaria y acorde a las condiciones específicas ambientales (revisión en
Rossignol et al., 2006).
El estudio de la locomoción con resonancia magnética funcional (RMf) se ve obstaculizado debido a la dificultad de permanecer
de pie en un escáner de alto campo magnético que permita el registro de la actividad cerebral evocada por el stepping, y la
naturaleza de la tarea en sí misma. Para abordar esta limitación, varios enfoques han sido propuestos para proporcionar una
evidencia indirecta de la participación cortical en la locomoción. Estos enfoques van desde la exploración de los patrones de
actividad cerebral durante acciones imaginadas como estar de pie, caminar y correr (Miyai et al., 2001; Jahn et al., 2004; Sacco
et al., 2006; Bakker et al., 2007; La Fougere et al., 2010), a la evaluación las áreas cerebrales activas durante la realización de
movimientos pasivos y voluntarios dentro del escáner. Esto último ha sido estudiado desde diversos niveles de complejidad:
desde la evaluación de movimientos unilaterales y repetitivas aislados de tobillo y rodilla (Debaere et al., 2001; Dobkin et al.,
2004; Sahyoun 2004; Kapreli et al., 2006; Newton et al., 2008; Francis et al., 2009; Woolley et al., 2010) a tareas más complejas
que requieren movimientos coordinados de múltiples articulaciones como pedalear (Mehta et al., 2009) o stepping (Hollnager
et al., 2011; Toyomura et al., 2012).
Si bien los estudios de neuroimagen basados en acciones locomotora imaginadas no están afectados por artefactos
relacionados con el propio movimiento, éstos han proporcionado información valiosa a pesar de que no permiten una
evaluación directa de la actividad neuronal asociada con movimientos reales. Por otro lado, los movimientos alternantes (anti-
fase) y repetitivos de las extremidades inferiores requieren la coordinación entre las piernas, mecanismo empleado también
durante la locomoción y por lo tanto se han propuesto como una modelo clínico de la marcha (Miyai et al., 2001). Las ventajas
de este enfoque radica en que los movimientos de stepping se pueden realizar en una posición supino, lo cual el estudio de su
activación cerebral evocada con medios como la RMf o el PET, dado que el movimiento de cabeza es minimizado (Mehta et al.,
2009; Hollnager et al., 2011).
La medida cuantitativa del movimiento es crucial en diseños experimentales de RMf que incluyen tareas motoras (Ashe et al.,
1994) dada la correlación existente de la actividad cerebral y los cambios dependientes del movimiento (Rao et al., 1996).
Hasta la fecha, los paradigmas motores que involucran a las extremidades inferiores no cuantifican la conducta que subyace
bajo la actividad cerebral. Los cambios en la intensidad de la señal de cualquier vóxel que surgen del movimiento de cabeza
representan un desconcierto en RMf, especialmente durante estudios de control motor. Para reducir el movimiento de cabeza
relacionado con la tarea, se ha sugerido el uso de dispositivos compatibles con la RMf como un medio exitoso para evaluar la
conducta motora al mismo tiempo que facilita movimientos aislados en las extremidades de interés con un movimiento de
cabeza mínimo (Newton et al., 2008). Otra estrategia empleada para evitar excesivos artefactos relacionados con el
movimiento de cabeza, es la evaluación de la actividad cerebral en el periodo de descanso posterior a la ejecución motora
(Mehta et al., 2009). Para generar movimiento rítmico, a menudo se emplea un estímulo externo auditivo o visual para guiar al
participante (Debaere et al., 2001; Sahyoun et al., 2004; Ciccarrelli et al., 2005; Toyomura et al., 2012)
En este trabajo, presentamos un dispositivo personalizado de pseudomarcha compatible con la RMf que facilita la realización
de movimientos bilaterales y alternantes de las extremidades inferiores dentro de orificio del escáner. Hemos empleado RMf
dependiente del nivel de oxígeno sanguíneo (del inglés BOLD, Blood Oxygen Level Dependent) para evaluar el patrón de
actividad cerebral asociada con la realización de esta tarea en un grupo de sujetos sanos. El dispositivo de pseudomarcha se
empleó para restringir el movimiento a las articulaciones de interés mientras registraba simultáneamente el movimiento
realizado por los sujetos. Una guía visuo-espacial fue diseñada para facilitar la generación de movimientos al ritmo
preestablecido, mientras la elección de la amplitud del movimiento fue diseñado como un parámetro libre que el sujeto
seleccionaba de acuerdo a su propio confort. La medición simultánea de parámetros cinemáticos de las extremidades
inferiores, en términos de amplitud y frecuencia, nos permitió establecer relaciones directas entre la señal BOLD y la conducta
motora concurrente.
2. Materiales y Métodos:
2.1. Instrumentación:
2.1.1. Dispositivo de pseudomarcha compatible con la RM: Diseñamos y manufacturamos un dispositivo portátil con el objetivo
de facilitar la ejecución de movimientos alternantes de las extremidades inferiores durante escaneo de RMf (Figura 1). Durante
su construcción se incluyó metal no magnético y plástico (materiales compatibles con el entorno de RMf) con un peso total de
12 kg. Su diseño estructural consiste en una cinta de marcha vertical conectada a una plataforma triangular de metacrilato. La
cinta de marcha se compone de una estructura con forma de arco que contiene dos columnas de rodillos independientes. La
posición de la estructura es ajustable a lo largo de la camilla de exploración de acuerdo a la altura del sujeto. La plataforma
triangular fue diseñada para limitar el movimiento a las articulaciones de interés. De este modo, ayudaba a los sujetos a
realizar movimientos de stepping voluntarios evitando movimientos de cadera mientras permanecían en posición supino.
Además, incluía un soporte personalizado para acomodar ambos tobillos (Figura 1b). El dispositivo permitía la medición del
ángulo rotado por cada rodilla (knee angle, or alpha) y del desplazamiento angular (D) producido por los pies durante su
contacto con los rodillos en la fase de apoyo (Figura 1c) por medio de dispositivos electrónicos (uno para cada pierna).
Figura 1. a) Set-up del dispositivo de marcha compatible con RM con un sujeto en posición supino situado en la tabla del escáner, b) dimen-
siones y componentes y, c) diagrama de diseño mostrando los principios operacionales.
Medida de α: cuatro potenciometros de cable (UniMeasure LX-PA2.8-L1M, con una linearidad Full-Scale de +-1%) fueron
fijados a la plataforma triangular en la distancia más lejana del centro del escáner para minimizar su efecto en la señal de la
RM. Dos cintas de velcro fueron localizadas alrededor de los tobillos de los sujetos. Los finales libres de los potenciómetros de
cable se los dos potenciómetros de cable se ataban a la cinta de velcro izquierda en el punto p (Figura 1c), y los dos cables
restantes se ataban a la extremidad derecha del mismo modo. Cuando un desplazamiento de pierna se producía, el punto p
describía una trayectoria circular centrada en la rodilla del sujeto. Para cada extremidad, los cables se desplazaban desde el
punto p al potenciómetro correspondiente pasando a través de dos fulcros (f1 y f2), los cuales estaban fijados a la estructura
de aluminio en el plano que contiene la pierna. Cuando p cambiaba su posición, los potenciómetros medían las distancias d1 y
d2 -desde f1 y f2 a p-. Una vez conocidas las distancias d1 y d2, las coordinadas x e y de p se calculaban (Taubin et al., 1991).
Una medida directa de alpha se computaba a partir de las coordenadas cartesianas de p (px y py) por medio de una función
circular (ver Ecuación 1 y Figura 1c para más detalles).
x
y
p
p
tg =α
(1)
La medida de alpha no dependía de la posición de los puntos de fijación, por lo que las cintas de velcro podían ser colocadas en
cualquier posición cerca de los tobillos de los sujetos.
Medida de D: la cinta de marcha contenía dos columnas de diez rodillos cilíndricos por columna manufacturados con cestileno.
El radio de cada rodillo era de 3 cm. Cuando un movimiento se realizaba en una de las columnas, los rodillos de ese lado
giraban juntos porque estaban conectados con cintas de uretano. Cuando el movimiento finalizaba, los rodillos se paraban
instantáneamente debido a la fricción del sistema de cintas. El cambio en posición producido por cualquier movimiento en
cada columna de rodillos se registraba en un encoder óptico incremental (Hewlett Packard HEDS-5540 de 10 bits de
resolución). Para convertir los valores registrados por los encoder y obtener así una medida espacial (desplazamiento angular,
D en cm), la cuenta registrada con ambos sensores durante una vuelta se aproximó al perímetro del rodillo.
Los únicos componentes eléctricos del dispositivo eran los sensores y dos cables apantallados que conectaban los sensores al
sistema de adquisición del dispositivo, localizado fuera de la sala del escáner. Los datos digitalizados de los sensores del
dispositivo se filtraron con un filtro de Butterworth paso bajo de 5º orden con una frecuencia de corte de 5 Hz. El sistema de
adquisición convertía las salidas eléctricas del dispositivo de pseudomarcha a señales digitales a una frequencia de muestreo
de 50 Hz a través de una tarjeta de adquisición de datos PCI (Sensoray Modelo 626) instalada en un PC. Finalmente, el PC
ejecutaba un script personalizado implementado en MAtlab (R2009b, The Mathworks Inc., Natick, MA, USA) el cual estaba
ejecutaba un diseño modelado en bloque en tiempo real con la Toolbox Real-Time Simulation para Simulink (Simulation and
Model Based Design Toolbox). Ambas herramientas permitieron una medición y descripción de la conducta cinemática
mediante las series temporales de alpha y D. Durante la sesión de escaneo, el sistema de adquisición se sincronizaba con
secuencia de RMf por medio un disparador óptico. Información sobre medidas de consistencia chequeadas son descritas en
Material Suplementario, Sección 1.
2.1.2. Set-up y operación: Una vez dentro del escáner, los sujetos permanecían supinos en la tabla de la RM, con ambos muslos
emplazados en la plataforma triangular del dispositivo de pseudomarcha con las rodillas flexionadas (aproximadamente 45º) y
los talones apoyados en su soporte (Figura 1). Unas almohadillas arqueadas fueron colocadas en los talones de los sujetos para
evitar movimiento artefactual cuando los sujetos apoyaban los pies en el soporte. Para minimizar el movimiento de cabeza, se
colocó una almohada hichable (Siemens Cushion Head 4765454) en la cabeza de los sujetos, así como cintas elásticas con
Velcro sobre los muslos y caderas.
Se solicitó a los participantes la ejecución de movimientos de stepping, donde cada paso de una extremidad comprendía un
componente vertical ascendente y otro descendente. El movimiento ascendente estaba compuesto por una dorsiflexión inicial
del tobillo para evitar el contacto del pié con los rodillos, simultáneo con una extensión progresiva de la rodilla. Una vez la
rodilla alcanzaba la máxima extensión, la suela del pié contactaba con los rodillos iniciando el movimiento descendente, el cual
era iniciado por una flexión plantar del tobillo acompañado con una flexión progresiva de la rodilla. Durante el movimiento
descendente, el contacto del pie con los rodillos se mantenía hasta que la rodilla alcanzaba la posición de máxima flexión,
implicando la oscilación de esa extremidad y el inicio de un nuevo paso. Los movimientos se restringieron al plano sagital
(vertical).
2.1.3. Estudio de compatibilidad: Dado que la instrumentación de RM y la operación del sujeto con el dispositivo (movimiento
relacionado con la tarea) genera dificultades técnicas y de calidad de imagen, su influencia en el entorno de RM debe ser
testeado previamente. Hasta la fecha, las medidas de evaluación típicas de calidad de imagen en RM incluyen la substracción
de imagen y comparación de la relación señal a ruido (SNR) entre las diferentes condiciones. En cuanto a las medidas de SNR,
dos variantes son frecuentemente empleadas. Las medidas de relación señal a ruido espacial (sSNR) miden relación de señal de
imagen estática sobre ruido de fondo; sin embargo no proveen más detalles acerca de las características de la serie temporal
de fMRI. Por otro lado, la relación señal a ruido temporal (tSNR) es una medida útil de estabilidad de la intensidad de la serie
temporal de la señal capaz de detectar ruido temporal de baja frecuencia y falsas señales de fMRI (Yu et al., 2011).
En el caso de estudios de neuroimagen, es habitual obtener una medida de la sSNR comparando la señal dentro y fuera de un
phantom radiológico. Específicamente, la sSNR se define como:
airSD
S
sSNR
×
=
655.0
(2)
donde, S es la señal media en una región de interés (ROI) emplazada en el centro del phantom y SDair es la desviación estándar
de la señal fuera del phantom. 0.655 es un factor de corrección debido a las características de distribución del ruido (Kaufman
et al., 1989). La sSNR se evaluó para cada imagen de la serie temporal.
La tSNR se formula para una serie temporal de imagen como el radio de la señal media sobre su desviación estándar temporal.
La tSNR se calculó para cada vóxel dentro de la ROI central del phantom.
seriestimevoxel
seriestimevoxel
SD
S
tSNR
__
__
=
(3)
Se realizó un estudio de compatibilidad en el que series temporales de 50 volúmenes de imágenes eco planares (EPI)* fueron
adquiridas de un phantom esférico lleno de agua destilada (Siemens D170 de 170 mm de diámetro) en cuatro condiciones
diferentes:
Condición p1: Phantom solo (condición de línea base), con el dispositivo situado fuera de la sala del escáner;
Condición p2: phantom con el dispositivo localizado en la tabla del escáner (sin efecto del movimiento);
Condición p3: phantom con el dispositivo localizado en la tabla del escáner y una persona movimento los rodillos y las cintas de
velcro al ritmo preestablecido.
Condición p4: phantom sólo (segunda condición de línea base).
• Los parámetros de la secuencia EPI durante el estudio con phantom fueron idénticos a los empleados durante el estudio fMRI
que son descritos en la sección 2.2.2.
Para minimizar los cambios en el entorno de la sala de escaneo, todas las condiciones experimentales fueron registradas en la
misma sesión y sin mover ni la tabla del escáner ni el phantom entre las condiciones. Para estimar el efecto de la introducción
del dispositivo en el entorno de RM, su movimiento y las inestabilidades del escáner, evaluamos las diferencias en las imágenes
promedio de cada condición (realizando una resta directa entre vóxels de la condición p1 respecto a las condiciones p2, p3 and
p4) y cuantificamos el porcentaje de cambio en brillo en las imágenes diferencia. También determinamos la sSNR y tSNR de
cada condición. Los resultados fueron comparados en Matlab (R2009b, The Mathworks Inc., Natick, MA, USA) con un test de
Kruskal-Wallis.
2.2 Estudio de RMf
2.2.1. Sujetos
Diecinueve voluntarios diestros (Oldfield, 1971) -9 mujeres; edad 33 ± 5 años, altura 168 ± 8 cm, peso 69 ± 12 kg; media ± DS-
sin historial de alteración neurológica, motora o cardiovascular fueron reclutados entre el personal de la Universidad de
Navarra. Antes de su participación, todos los sujetos firmaron un consentimiento informado.
2.2.2. Protocolo de escaneo
El estudio fue llevado a cabo en un escáner de 3T (Siemens Trio TIM, Siemens AG, Erlangen, Alemania) equipado con una
bobina de cabeza con un array de 12 canales. Consistió en una sesión que incluía la adquisición de una secuencia anatómica y
otra funcional, con una duración de 15 minutos.
La imagen anatómica T1 fue adquirida con una secuencia MPRAGE de 5 minutos de duración. Los siguientes parámetros
fueron empleados: 1mm resolución isotrómica, campo de visión (FOV) = 256 x 192 mm2, matriz = 256 x 192 voxels, 160 slices
axiales, tiempo de repetición / tiempo de eco (TR/TE) = 1620/3.09 ms, tiempo de inversión (TI) = 950 ms, ángulo flip=15º.
Durante la serie funcional, un total de 240 volúmenes sensitivos a contraste BOLD fueron adquiridos empleando una secuencia
EPI T2*. Cada volume comprendía 36 slices transversales de 4 mm de grosor con un hueco de 0.2 mm. Otros parámetros de
interés fueron: resolución = 3 x 3 mm2, FOV = 192 x 192 mm2, matriz = 64 x 64 voxels, TE = 24 ms, TR = 2.0 s.
2.2.3. Paradigma funcional
El paradigma motor intercalaba bloques de zancadas alternantes voluntarias de las piernas de 10 s (condición de stepping, o
SC) y bloques de reposo de 30 s (condición control o CC). Una guía visual externa fue incluida para asistir a los sujetos en la
consecución de un patrón rítmico. Las guías (pistas) consistían en dos huellas que se movían vertical y alternativamente a 1.2
Hz. La secuencia comenzaba con el pie derecho, mientras cada huella revertía su trayectoria al alcanzar los puntos superiores e
inferiores (Figura 2). Finalmente, tras 5 repeticiones, uno de las guías no finalizaba su correspondiente zancada, volviendo a su
posición inicial e indicando al participante que el bloque estaba finalizando. La video-animación fue generada en Adobe®
Flash® Professional (http://www.adobe.com/products/flash.html) y proyectada en una pantalla que era visible gracias a un
espejo colocado sobre la bobina de cabeza de los participantes.
Una cruz de fijación aparecía en el centro de la pantalla justo antes del inicio de SC, indicando que el bloque de stepping
estaba a punto de comenzar. Durante SC, los sujetos realizaron los movimientos de stepping ayudados por el dispositivo de
pseudomarcha y la guía visual. Además, los participantes eran libres de seleccionar la amplitud de sus pasos. Durante CC, los
sujetos fueron instruidos para relajarse manteniendo los ojos abiertos y los pies en el soporte del talón del dispositivo. Para
minimizar los efectos visuales de no interés en la actividad cerebral, el estímulo visual fue mantenido en ambas condiciones
(con la excepción del color, el cual era blanco en SC y amarillo en CC). Cada condición se repitió 12 veces con una duración total
de 8 minutos. Datos de un Eye-Tracker fueron registrados simultáneamente para controlar la atención y el sueño.
Previo a la sesión de escaneo, los sujetos practicaron el paradigma fuera y dentro del escáner hasta conseguir un patrón
coordinado confortable en las extremidades inferiores. Los investigadores explicaron la importancia de mantener la cabeza lo
más quieta posible dentro del escáner. Durante el registro de RMf, las medidas de α y D fueron registradas continuamente.
2.2.4. Análisis de datos
2.2.4.1. Análisis de datos cinemáticos.
La Tabla 1 describe las características cinemáticas de la conducta motora mostrada por los participantes, la cual fue
estimada a partir de los perfiles temporales de α y D.
Primero, se identificaron los tiempos de flexión y extensión de las rodillas izquierda y derecha, a partir de los picos de los
perfiles temporales de α. La frecuencia de stepping de la rodilla (SFk, en Hz) se definió como la inversa del tiempo entre
extensiones sucesivas de las rodillas. La amplitud de stepping (SA, en grados) se computó como la suma de los ángulos de
extensión y flexión de cada paso. Además, un coeficiente de asimetría (AC), fue definido como la relación espacial entre las SAs
derecha e izquierda. Este parámetro refleja diferencias angulares entre los desplazamientos de las rodillas, por lo que en un
movimiento totalmente simétrico, el AC debería resultar 1. Finalmente, la extensión total de movimiento (TEM, en grados) se
computó como al suma de los SAs izquierdo y derecho a lo largo de un bloque SC.
Figura 2. Paradigma motor empleado en el studio con una guía visuo-espacial indicando la evolución del patron
especial de las guías en el plano sagittal. La frecuencia de stepping empleada en este estudio es equivalente a un
periodo de 0.83 s.
Después, las características temporales de los pies se extrajeron del perfil temporal de D. La velocidad de los rodillos se
derivó de D, lo cual permitió identificar los contactos iniciales de cada pie con el sistema de rodillos así como su separación de
los rodillos tras dar un paso. La duración de stepping de los pies se calculó como el tiempo transcurrido entre contactos
sucesivos de los pies con los rodillos, y la frequencia de stepping de los pies (SFf, en Hz) se define como la inversa de la duración
de stepping de los pies.
Todas las medidas de los parámetros fueron calculados durante todos los bloques SC y promediados empleando scripts
personalizados en Matlab.
Característica Acrónimo Unidad Descripción
Frecuencia de stepping de las
rodillas
SFk Hz Frecuencia entre extensiones sucesivas de las rodillas a lo largo de
un bloque SC.
Amplitud de stepping SA grados Ángulo total rotado por cada rodilla (extension + flexion) durante
un paso
Coeficiente de asimetría AC - Relación entre SAs de la rodilla derecha e izquierda
Total extent of movement TEM grados Desplazamiento total a lo largo de un bloque SC (suma de SAs
derecha e izquierda)
Frecuencia de stepping de los
pies
SFf Hz Frecuencia de los conctactos sucesivos de los pies con los rodillos
durante un bloque SC.
Tabla 1. Descripción de las características cinemáticas evaluadas durante la conducta motora.
Los últimos dos movimientos correspondientes al final de cada SC fueron descartados debido a que no eran pasos completes.
Los parámetros cinemáticos fueron promediados a lo largo de los bloques SCs para obtener una medida representativa para
cada sujeto. Dado que los sujetos seleccionaban su SA preferida, llevamos a cabo un análisis de regresión múltiple en Matlab
para determinar si esta característica correla con alguna de las características demográficas (sexo, edad, altura y peso) de la
población. Un p-valor de p < 0.05 fue considerado como estadísticamente significativo.
2.2.4.2. Análisis de datos de neuroimagen
2.2.4.2.1. Preprocesado
El preprocesado y análisis de datos fueron realizados empleando la herramienta Statistical Parametric Mapping (SPM8)
(Statistical Parametric Mapping software, SPM: Wellcome Department of Imaging Neuroscience, London, UK;
http://www.fil.ion.ucl.ac.uk/spm/) y scripts personalizados implementados en Matlab. Para cada sujetos, los volúmenes EPI
fueron realineados al volumen central de la sesión con el algoritmo de realineado de SPM8 (Friston et al., 1996). La
herramienta Artifact Repair toolbox (versión 5, Mazaika et al., 2009) fue empleada para detectar y eliminar artefactos de las
imágenes realineadas. El umbral de movimiento fue 0.5 mm/TR y los volúmenes artefactuales fueron reemplazados por el
promedio de los scans adyacentes. Decidimos a priori que una sesión con más del 10% de los volúmenes artefactadas sería
descartada. Los datos realineados fueron coregistrados con la imagen anatómica individual y normalizados espacialmente a la
plantilla MNI (Montreal Neurological Institute) basados en coordinadas ICBM-152 (Fonov et al., 2011) usando los parámetros
determinados de la segmentación combinada y la normalización de la imagen anatómica (Ashburner et al., 2005)- Un filtro
gausiano de 8 mm de FWHM (full width at half maximum) fue aplicado para suavizar espacialmente los datos.
2.2.4.2.2. Análisis estadísticos
Para evaluar las diferencias de señal BOLD entre las condiciones, un análisis por inferencia estadística fue realizado en el
contecto del Modelo General Lineal (GLM, del inglés General Linear Model, Friston et al., 1995). Análisis estadísticos voxel-wise
fueron realizados para cada sujeto en un diseño de bloques que modelaba ambas condiciones SC y CC –empleando una función
boxcar convuelta con la función de respuesta hemodinámica- tras suavizar los volúmenes temporalmente con un filtro paso
alto de 0.008 Hz para eliminar los desplazamientos lentos de señal con un periodo mayor de 128 segundos que están
relacionados con ruido del escáner y fisiológico. Los parámetros de movimiento extraidos del realineado no fueron incluidos en
la matriz de diseño para evitar el impacto deletéreo en la sensitividad cuando el movimiento y el diseño experimental están
correlados (Johnstone et al., 2006). El contraste de interés SC > CC fue estimado individualmente con un modelo fixed-effects
seguido de una inferencia de grupo con un modelo random effects (Penny et al., 2004). Para evaluar el efecto de incorporar en
el análisis los datos cinemáticos pertenecientes a la ejecución concurrente de los sujetos, este análisis fue replicado incluyendo
como covariable a nivel de sujeto el TEM realizado durante cada bloque SC. El hecho de introducir esta covariable permitió
controlar las posibles variaciones de conducta motora entre bloques.
Un análisis final a nivel de grupo fue realizado incluyendo como regresores la media y varianza de la SA de cada sujeto, además
de los mapas de activación de los contrastes SC > CC pertenecientes al primer nivel. El objetivo de la primera covariable era
estudiar la actividad neural correlacionada con los distintos desplazamientos individuales de las extremidades inferiores,
mientras las varianza se añadió como variable de no-interés. Dos t-mapas de grupo fueron generados para, (1) examinar la
actividad relacionada con el stepping (SC > CC), y (2) testear la activación positivamente correlacionada con la SA mediante un
t-test de una muestra para el parámetro de contraste específico de la matriz de diseño. Un p-valor de p < 0.05 (corregido por
FDR a nivel de clúster) fue empleado para corregir por múltiples comparaciones, tras un umbralizado a nivel de voxel de p <
0.001 (T = 3.69) sin corregir.
3. Resultados
3.1. Estudio de compatibilidad
La Figura 3 muestra los resultados de la prueba de compatibilidad en la cabeza del phantom. En la Figura 3a, las imágenes
medias de las condiciones experimentales p1, p2, p3 and p4 son dibujadas en las dos columnas de la izquierda, mientras la
tercera columna muestra la diferencia de intensidad entre ambas condiciones resultante de una resta directa de los vóxels de
ambas condiciones. Observamos un 2.5%, 1.9% y 3.07% de cambio en el promedio de intensidad entre condiciones ‘p2’ y‘p1’
(Figura 3a, primera fila), ‘p3’ y ‘p1’ (Figura 3a, segunda fila) y ‘p4’ y ‘p1’, (Figura 3a, cuarta fila), respectivamente. Cuando
comparamos las condiciones ‘p2’ y ‘p3’para estimar el efecto del movimiento (realizado a una distancia del phantom) (Figura
3a, tercera fila), observamos un cambio en el brillo medio de 0.9%. Estos cambios eran visualmente imperceptibles al
mostrarlos en la escala de brillo original. Sin embargo, al aumentar la escala al 5% de su valor original, observamos cambios
sistemáticos en brillo y un efecto de ghosting alrededor del contorno del phantom (Figura 3a, cuarta columna).
La Figura 3b y 3c muestran los valores promedio y desviación estándar de las sSNRs y tSNRs calculados para cada condición. Los
tests de Kruskal-Wallis evaluando las diferencias en sSNR y tSNR entre condiciones no llegaron a alcanzar significación (psSNR =
Figura 3. Evaluación de la compatibilidad del dispositivo de pseudomarcha. a) Imágenes promedio del
phantom durante las diferentes condiciones (p1: phantom solo (condición de línea base), p2: phantom
con dispositivo, p3: phantom con dispositivo y una persona simulando movimiento de stepping y p4:
phantom sólo (segunda línea base) y substracción a pares de las condiciones anteriores, mostradas a
escala compoleta y 5% de escala. b) valores de la relación señal a ruido espacial (sSNR) para todas las
imágenes de la serie temporal y, c) valores de la tSNR de los vóxels situados en la ROI central del
phantom. No se encontraron diferencias significativas entre ninguna de las condiciones.
0.97 y ptSNR = 0.122). Los resultados indican que los cambios en la señal producidos por la introducción y la operación del
dispositivo de pseudomarcha y las inestabilidades del escáner eran de relevancia despreciable.
3.2. Estudio conductual
3.2.1. Evaluación motora
Los parámetros de movimiento registrados a partir del movimiento de rodillas y pies corroboran que los participantes fueron
capaces de realizar los movimientos alternantes de las extremidades inferiores solicitados durante SC, con contactos precisos
de los pies en la cinta de marcha del dispositivo de pseudomarcha (ver en Figura 4a y 4b una muestra del perfil temporal
registrados en la rodilla (α) y el desplazamiento de los pies (D) de un sujeto representativo durante todas las SCs). Como se
puede observar, los perfiles registrados reflejan el patrón de coordinación anti-fase durante la ejecución de la tarea, similar a la
marcha.
Observamos una elevada variabilidad inter-sujeto en la característica SA, con una media de grupo SA = 45.25 ± 17.21⁰ (Figura
4c), lo cual significa que cada individuo ajustó la SA de sus movimientos de acuerdo al ritmo de la guía visual. El promedio de
grupo de las frecuencias de stepping de la rodillas y los pies fueron SFk =1.16 ± 0.06 Hz y SFf =1.15 ± 0.05 Hz, respectivamente
(Figura 4d). Además, las rodillas y los pies mostraron una coordinación similar pero no igual durante el movimiento de
stepping, como se refleja a través de la diferente variabilidad en la Figura 4d (más información en Material Suplementario 2).
Estos resultados confirman que los participantes machearon el patrón impuesto por la guía visuo-espacial, con un ritmo
preestablecido a 1.2 Hz. El valor de AC de grupo (parámetro que refleja la relación entre desplazamientos de la extremidad
derecha e izquierda) resultó 1.06 ± 0.103 y el TEM fue 478.16 ± 30.1⁰. Finalmente, el análisis de regresión múltiple mostró una
correlación negativa significativa (r = -0.42, p = 0.04) entre la SA y el peso de los sujetos (Figura 4e).
Figura 4. a) Series temporales de α y b) D durante todos los bloques SC (sobre-impuestos) de un sujeto representative (las curvas rojas y
azules representan los desplazamientos derecho e izquierdo, respectivamente), c) amplitude de stepping individual (SA), d) diagramas de
cajas de la frecuencia de stepping durante las tareas en los pies (SFf) y rodillas (SFk) y e) correlación lineal negativa entre SA y el peso.
3.2.2. Actividad neural asociada con el stepping
Stepping vs rest
El movimiento de cabeza permaneció por debajo de los 3 mm para todos los sujetos (más detalles en Material Suplementario
3). Por lo tanto, ningún sujeto ni sesión fueron descartados del estudio debido a un excesivo número de artefactos por
movimiento de cabeza. A nivel de grupo, la inclusión del TEM como covariable resultó en un aumento de la significación en los
mapas de contraste obtenidos (SC > CC). Adicionalmente, la significación estadística del mapa de contraste de grupo resultante
fue también mayor al incluir la media de la SA de los sujetos y la varianza como covariables en el análisis de grupo. Los
resultados muestran que la red cerebral activada por el stepping incluye bilateralmente a la corteza motora primaria (M1),
corteza premotora (PMC), área motora suplementaria (SMA) y corteza cingulada medial (MC), corteza somestésica primaria y
secundaria, y áreas en el lóbulo parietal inferior (IPC) y lóbulo parietal superior (SPL), incluyendo precuneus. Activaciones
subcorticales significativas fueron también encontradas bilateralmente en el putamen (más en el hemisferio izquierdo) y en la
corteza cerebellar somestésica vermiana y hemisférica (Figura 5 e información detallada en la Tabla 2).
Figura 5. Regions of the brain activated during the stepping task, superimposed on a two-(top) and three-dimensional (bottom)
standard brain. Signal changes were considered significant at p < 0.001 and corrected for multiple comparisons by FDR at the cluster-
level (k = 130). X: cluster not surpassing the threshold for multiple comparisons. The color scale represents statistical T-values.
Region Tamaño clúster
(Voxels)
Lado Coordenadas MNI
X Y Z
Stat.
val. T
Lóbulo paracentral (BA4) 28225 D 6 -25 63 18.19
I -6 -27 63 16.74
Giro precentral (BA4a) D 15 -30 69 16.69
Giro frontal superior (BA6) D 23 -9 60 12.66
Giro supramarginal (BA48) 3426 I -54 -25 15 10.74
Giro temporal superior (BA22) I -61 -21 12 4.71
Giro supramarginal (BA2) 3401 D 56 -30 31 11.14
Sulco intraparietal (BA40) D 36 -39 40 6.50
Giro precentral (BA4) 1135 D 51 8 31 6.49
Giro frontal inferior, p. Opercularis (BA48) D 53 9 9 5.61
Vermis cerebelar (lóbulos I-IV (Hem)) 400 D 2 -48 -14 6.14
Hemisferio cerebelar (lóbulo V) I -21 36 -27 5.57
Hemisferio cerebelar (lóbulos I-IV) I -11 40 -21 4.62
Putamen 224 I -26 -4 10 5.64
Cerebelo (lóbulo V) 130 D 24 -36 -29 5.20
Giro precentral (BA6) * 105 I -57 4 24 6.43
Insula (BA13-16) * 82 I -45 0 7 4.56
Giro frontal medio (BA46) * 76 D 35 47 22 4.61
Opérculo rolándico (BA48) * 58 I -56 8 3 4.83
Putamen * 54 D 27 3 7 4.17
Giro frontal inferior, p. Opercularis (BA6) * 30 I -57 8 13 4.08
Tabla 2. Coordinadas MNI de las áreas anatómicas que muestran máximos de activación en el análisis de grupo relacionado con stepping. Los cambios en la
señal fueron considerados significativos con un p-valor de p < 0.001 y corregido por múltiples comparaciones por FDR a nivel de clúster (k = 130; D, derecho, I,
izquierdo; BA, Brodmann Area). * Estas áreas fueron observadas a at p<0.001 sin corregir, sin embargo, debido a su tamaño de clúster, los valores no
sobrevivieron a la corrección.
Actividad cerebral correlada con la amplitud del paso
El mapa de contraste resultante del análisis de grupo mostró actividad positivamente correlada con la SA en varias regiones,
incluyendo las cortezas visuales primaria y asociativa bilateralmente, y giro lingual, el complejo temporal medio (hOC5/V5); el
giro superior postcentral derecho, el córtex cingulado medial derecho, PMC bilateralmente y SMA del lado derecho, el giro
precentral derecho, el opérculo rolándico derecho, el córtex prefrontal dorsolateral izquierdo, el núcleo caudado derecho y el
putamen dorsal bilateralmente (Figura 6 y más detalles en Tabla 3).
Figura 6. Regiones cerebrales asociadas con la SA. Los cambios de la señal BOLD fueron considerados significantes a partir de un p-valor p
< 0.001 y corregidos por múltiples comparaciones con FDR a nivel de clúster (k = 172). La escala de color representa valores-T estadísticos,
mientras que las gráficas superiores y posteriores representan la correlación positiva entre la señal BOLD y SA en regiones cerebrales de
interés.
Región Tamaño clúster
(vóxels)
Lado Coordenadas MNI
X Y Z
Stat.
val. T
Giro lingual (BA18) 2746 D 12 -58 0 7.14
Giro temporal inferior (BA19) D 42 -70 -5 5.39
Giro temporal medio (BA37) D 41 -69 13 5.25
Giro fusiforme (BA19) D 30 -66 -9 5.16
Giro calcarino (BA17) D -9 -70 16 4.75
Giro frontal superior (BA6) 1594 D 18 -18 58 6.20
26 -9 70 6.06
14 11 48 4.64
Giro frontal superior (BA8) D 17 15 60 4.79
Giro frontal medio (BA8) D 32 6 57 4.63
Giro precentral (BA4) 1037 D 18 -30 70 5.98
Giro postcentral (BA3) D 33 -34 63 5.37
Sulco intraparietal (BA40) D 39 -36 39 4.86
D 39 -34 46 4.83
Opérculo rolándico (BA48) 553 D 53 0 15 6.00
Putamen 325 I -20 8 13 5.23
Giro inferior frontal, p. Opercularis (BA48, BA45) 306 D 39 14 15 5.16
Nucleo caudado D 21 15 12 4.73
Corteza cingulada posterior (BA27) 295 D 2 -38 9 7.22
Lóbulo parietal superior (BA5M) 233 D 11 -55 53 5.23
Lóbulo parietal superior (BA7A) D 15 -57 59 3.94
Sulco intraparietal (BA19) D 21 -52 40 4.10
Giro frontal medio (BA47) 184 I -29 45 19 4.80
Giro lingual (BA19) 172 I -18 -58 -3 5.28
Tabla 3. Coordinadas MNI de las áreas anatómicas mostrando correlación positiva con la SA. Las correlaciones se considerán significante a un
p-valor < 0.001, corregido por múltiples comparaciones por FDR a nivel de (k = 172; D, derecho, I, izquierdo).
4. Discusión
Hemos diseñado y testeado un paradigma motor de RMf durante el cual medidas de actividad cinemática y BOLD asociada con
movimientos voluntarios alternantes de las extremidades inferiores fueron registradas concurrentemente en sujetos sanos.
Una cinta de marcha vertical personalizada fue empleada en combinación con una guía visuo-espacial externa para facilitar la
sincronización del movimiento con el ritmo requerido durante la tarea. Los movimientos de stepping fueron registrados y
cuantificados, permitiendo evaluar la una correlación entre la amplitud del movimiento y la actividad BOLD evocada. Nuestros
resultados demuestran que los movimientos de stepping generan activaciones cerebrales bilateral en varias areas corticales y
subcorticales que están relacionadas con la ejecución y el control motor (ver Figura 5 y Tabla 2).
4.1. Dispositivo de pseudomarcha
En cuando a la compatibilidad magnética, minimizamos el impacto en el campo magnético construyendo el dispositivo
principalmente de materiales no ferromagnéticos. Hemos empleado métodos estándar para evaluar la compatibilidad
magnética, los cuales indicaron que el dispositivo de pseudomarcha no alteraba significativamente el entorno magnético
mientras restringe los movimientos de stepping a las articulaciones de interés con un movimiento limitado de la cabeza. En
Hollnager et al., 2011, se presenta un dispositivo el cual permite la generación y la medida de fuerzas activas y pasivas
relacionadas con movimientos de stepping. Ambos estudios representan herramientas valiosas que muestran la viabilidad de
los dispositivos compatibles en estudios de RMf de las extremidades inferiores.
4.2. Cinemática
Los resultados revelaron que los participantes siguieron los movimientos guiados visualmente mediante desplazamientos
adecuados y precisos al ritmo requerido (Figura 4d), mostrando un patrón de coordinación anti-fase en las extremidades
inferiores (Figura 4a, 4b y Material Suplementario 3). La cadencia de los pies no fue totalmente síncrona con las extensiones de
las rodillas, por lo que las correcciones de la rodilla durante los pasos consecutivos no estaban completamente sincronizadas
con el desplazamiento de los rodillos. Esto sugiere, que pesar de una relación cercana entre las extremidades del mismo lado,
existe cierta autonomía entre el movimiento de la rodilla y de los pies.
Por otro lado, la opción de seleccionar libremente la amplitud del movimiento resultó en diferencias en la SA entre los sujetos
(Figura 4c) y por consiguiente también en el TEM. El valor de la SA resultó correlacionado con el peso de los sujetos pero no
con la altura. La falta de correlación con la altura podría explicarse por el ajuste del dispositivo de pseudomarcha con la altura
individual en la tabla del escáner y por ser la unidad de medida angular. La correlación negativa con el peso (Figura 4e) podría
ser debido al hecho de estar en posición supino y podría reflejar fuerzas gravitacionales que podrían hacer la tarea más
fatigosa para aquellos de mayor peso. Sin embargo, la longitud de la zancada también varía entre individuos en marcha normal
(Hausdorff et al., 2001). Por tanto sería interesante evaluar en estudios futuros si las diferencias en las medidas experimentales
reflejan diferencias inter-individuales en marcha normal.
La marcha humana es considerada simétrica (Sadegui, 2000) y está caracterizada por un movimiento cíclico gobernado por un
patrón de coordinación anti-fase entre ambas extremidades. La información sensorial derivada de los movimientos alternantes
de las piernas también contribuye a la generación y coordinación de los músculos durante la actividad locomotora (Kawashima
et al., 2005). De este modo, nuestro estudio incorpora movimientos simétricos con un patrón de coordinación anti-fase realista
entre ambas piernas, dado que la interacción con el dispositivo comprende funcionalidad de las rodillas, tobillos y pies, dando
lugar a feedback somatosensorial relevante. Por tanto, la tarea presentada en este estudio estaba caracterizada por un
movimiento bien aprendido que podría reflejar alto parecido con un patrón de locomoción. Sin embargo esta tarea, como un
modelo de marcha, no está libre de limitaciones. El objetivo de la locomoción es soportar el cuerpo contra la gravedad a la par
que generar movimientos que desplacen apropiadamente el cuerpo hacia delante (Winter, ,1995). Es complicado replicar con
montajes de RMf estándar aspectos específicos de la marcha y de la estancia vertical, equilibrio, soporte postural y otros
efectos gravitacionales e inerciales. Otros componentes de la marcha, como el control del tronco y caderas, o la coordinación
de músculos gluteales y de las piernas con los brazos son aspectos que este diseño no contempla debido a las fijaciones del
sujeto y a su posición. Hemos testeado en un estudio case algunas evidencisa entre el stepping vertical y supino con técnicas
EEG y EMG (Material Suplementario 4). A pesar de diferencias notables entre nuestra tarea y la marcha real, el diseño con el
dispositivo de marcha parece una herramienta adecuada para investigar aspectos de la marcha dentro de un entorno de RM.
4.3. Activación cerebral asociada al stepping
La comparación entre las condiciones motoras y reposo (contraste SC > CC) reveló que el stepping activa una red cerebral que
comprende las cortezas sensorimotora primaria y somatosensorial, SMA, PMC, CMA, los ganglios basales y el cerebelo (Figura
5 y Tabla 2). Los resultados están de acuerdo con estudios de neuroimagen previos los cuales han evaluado la actividad
durante tareas de las extremidades inferiores unilaterales (Dobkin et al., 2004; Sahyoun et al., 2004; Ciccarelli et al., 2005,
Newton et al., 2008; Wooley et al., 2010) y bilaterales (Mehta et al., 2009; Hollnager et al., 2011; Toyomura et al., 2012). El
desplazamiento total (TEM) individual demostró ser una covariable de no interés útil que permitió normalizar los datos
funcionales en los análisis estadísticos individuales y por lo tanto mejoró la significación estadística general de los mapas de
activación grupales del análisis de efectos aleatorios (RFX). Esto enfatiza la importancia del uso de medidas cinemáticas
cuantitativas en análisis con paradigmas motores en RMf.
Hay una evidencia convergente sobre la implicación de una red organizada de estructuras neurales a nivel espinal y
surpaespinal durante tareas coordinadas, en las cuales procesos dinámicos tienen lugar para asegurar una organización
eferente e integración sensorial (Swinnen, 2002). Específicamente, M1, SMA y PMC han mostrado participar en aspectos de
codificación relacionados con la preparación y ejecución durante movimientos secuenciales voluntarios y externamente
guiados de las extremidades superiores (Ashe and Ugurbil, 1994; Dai et al., 2001; Swinnen, 2002). La activación del PMC ha
sido descrita en paradigmas que incluyen movimientos rítmicos guiados a diferencia de movimientos rítmicos generados
internamente, y podría estar relacionados con la planeación del movimiento (Wessel et al., 1997). Además, las áreas
premotoras son cruciales en el procesado de señales visuales para la planeación de la acción (Hoshi and Tanki, 2006) y han sido
directamente asociadas con un comportamiento coordinativo anti-fase: un estudio de PET que involucra movimientos
coordinados de los dedos y el tobillo de extremidades opuestas propuso que un circuito neural común distribuido a lo largo de
la corteza premotora dorsal derecha y la corteza parietal derecha estaba implicado en los movimientos anti-fase (de Jong et al.,
2002). Por otro lado, las áreas premotoras y parietales posteriores medían aspectos perceptivos relacionados con la estimación
de la distancia y la codificación espacial de localizaciones relativos con las partes del cuerpo, especialmente en referenciado
egocéntrico (Vallar et al., 1999, Committeri et al., 2004). El CMC podría servir como un interfaz motor motivacional (Ball et al.,
1999) dado que este áreas está implicado en aspectos de procesado intencionales del movimiento (Debaere et al., 2001).
Últimamente, los ganglios basales (GB) y el cerebelo (CB) han sido relacionados clásicamente al control motor (Middleton and
Strick, 2000). Se ha sugerido la participación de los GB en percepción temporal y codificación de intervalos temporales (Rao et
al., 2001, Pastor et al., 2004). Por ejemplo, un estudio reciente que involucra movimientos alternantes coordinados de las
piernas similares a nuestra tarea, sugiere un papel significativo de los GB, particularmente bajo condiciones de generación de
ritmo interna (Toyomura et al., 2012). Las áreas que encontramos activadas durante el movimiento de piernas en el CB
coinciden anatómicamente con la representación somatotópica de los pies en el cerebelo humano superior: un homúnculo
upside-down ‘invertido?’ (Grodd et al., 2001). El CB está implciado en monitorización y optimización de movimientos mediante
feedback sensorial (Juepner and Weiller., 1998), especialmente en aquellos que requieren coordinación visuo-motora (Stein
and Glickstein, 1992); activación en la vermis ha sido observada en estudios de movimientos repetitivos de las extremidades
inferiores tanto de forma auditiva como visual (Debaere et al., 2001, Sahyoun et al., 2004).
En resumen, el contraste comparando las condiciones movimiento y reposo dio lugar a una activación funcional implicando a
estructuras corticales y subcorticales en la ejecución motora y control de movimientos volutuntarios. Los resultados apoyan la
utilidad y validez de la tarea como un modelo funcional de marcha.
4.4. Actividad cerebral relacionada con la Amplitud del Paso (SA)
Se encontraron varias regiones cerebrales donde la señal BOLD mostró una relación lineal con el regresor cinemático SA (Figura
6 y Tabla 3). Una correlación positiva entre la señal BOLD y la SA implica que los sujetos con mayor amplitud del paso tienen
una mayor actividad cerebral en determinadas áreas que aquellos con menor amplitud (Figura 6). Encontramos una
correlación positiva entre la señal BOLD y la SA en varias áreas corticales y subcorticales, incluyendo bilateralmente a la corteza
visual primaria y áreas extraestriales del lado derecho, el giro lingual, el complejo temporal medio derecho (hMT/V5+), la
corteza cingulada posterior derecha, el precúneus, el SPL derecho, el IPL extendido al giro postcentral y el putamen anterior
bilateral.
La activación que encontramos en la corteza estriada (cortex visual primario) podría estar relacionada con el procesado visuo-
atencional requerido para filtrar información relevante de la acción orientada a un objetivo así como con las demandas
visuales durante la tarea (Corbetta and Shulman, 2002) mientras que las áreas extra-estriadas podrían estar relacionadas con la
generación de predicciones visuales relevantes para controlar las acciones (Astafiev et al., 2004): el área temporal media
hMT/V5+ es una región principalmente sensitiva al movimiento relacionada precisamente con el procesado del movimiento
(Sunaert et al., 1999). Además, el procesado visuo-motor de relaciones espaciales egocéntricas podría estar mediado por áreas
parietales superiores mediales, como el precúneus (Zaehle et al., 2003) y áreas en el sulco intraparietal, el cual ha mostrado
una función central en el control de los ojos y la generación de atención visual (Bisley et al., 2003). Los resultados indican que
los sujetos con mayor SA podrían estar realizando un mayor esfuerzo. Además, la percepción espacial somestésica egocéntrica
ha sido relacionada con la conectividad entre el SPL derecho (incluyendo precúneus y giro supramarginal), el cortex
dorsolateral prefrontal y el giro lingual (Loayza et al., 2011). Observamos participación de áreas subcorticales como el estriado
bilateral, el cual ha sido relacionado con el control de la cantidad de movimiento (Turner et al., 1998). Interesantemente, el
putamen dorsal, el cual corresponde somatotópicamente con la región de las piernas (Gerardin et al., 2003), estaba correlado
con el regresor SA.
Finalmente, cabe destacar la lateralización derecha encontrada en las activaciones. Generalmente se asume que el lcerebro
muestra asimetrías funcionales entre sus hemisferios, por ejemplo, está demostrado que el hemisferio izquierdo domina el
control motor en sujetos diestros mientras los circuitos parieto-frontales del hemisferio derecho están especializados en la
atención y el procesado espacial. Nuestros resultados sugieren que los mecanismos de control visuo-motores y de control
atencional podrían ser empleados para producir una conducta motora coordinada, la cual podría estar mediada por áreas
estriadas, extra-estriadas y fronto-parietales.
En conclusión, el uso de un dispositivo de pseudomarcha personalizado junto a la medida concurrente de la conducta motora
del sujeto ha demostrado ser relevante para extraer imágenes BOLD sin artefactos que reflejan el movimiento real realizado
por los sujetos dentro del escáner. Además, el diseño permitió un análisis detallado de la conducta individual basado en
características cinemáticas. En general, la combinación del análisis cinemático y de RMf de la conducta a lo largo de la sesión
de escaneo ofrece un gran potencial durante el estudio de los sistemas motores en el cerebro y sus desórdenes.
5. Agradecimientos
Estamos muy agradecidos al Dr. Valencia, Dr. Alegre y Dr. Artieda por su asistencia durante los análisis de las grabaciones EEG y
EMG (Material Suplementario 4). Este trabajo fue fundado por el FIMA de la Universidad de Navarra y por una concesión del
FIS PI081949 y el Gobierno de Navarra ref. 342005.
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  • 1. Dispositivo de resonancia magnética funcional para examinar la activación cerebral relacionada con el stepping Martín Martínez (miembro del IEEE), Federico Villagra, Francis Loayza, Marta Vidorreta, Gonzalo Arrondo, Elkin Louis, Javier Díaz, Mikel Echeverría, María A. Fernández-Seara, María A. Pastor* Resumen- Los movimientos repetitivos y alternantes de las extremidades inferiores (stepping) son un componente específico de la marcha humana. Debido a dificultades técnicas, los mecanismos neurales responsables de tales movimientos no han sido estudiados previamente con resonancia magnética funcional (RMf). En este estudio, se presenta un nuevo dispositivo de marcha empleado para investigar la cinemática y la patrones de activación cerebral involucrados en los movimientos alternantes y repetitivos de las extremidades inferiores. Una vez dentro del escáner, diecinueve sujetos sanos fueron guiados por dos señales visuales e instruidos para realizar una tarea motora que involucró movimientos repetitivos y alternantes de ambos miembros inferiores, mientras cada sujeto seleccionaba una amplitud cómoda. El dispositivo permite un movimiento coordinado a la vez que registra los desplazamientos concurrentes, lo cual permite cuantificar algunas de las características cinemáticas primarias del movimiento, como amplitud y frecuencia. La actividad cerebral relacionada con los movimientos de las piernas se corresponde con una red bilateral que incluye la corteza sensorimotora primaria y secundaria, área motora suplementaria, corteza premotora, corteza prefrontal, lóbulo parietal superior e inferior, putamen y cerebelo, regiones que son conocidas por su participación en el control motor del tren inferior. Activaciones cerebrales relacionadas con la amplitud del movimiento de las piernas fueron identificadas en una red lateralizada al lado derecho que incluye al estriado y regiones extra-estriatales y fronto-parietales. Palabras clave: locomoción, resonancia magnética funcional, movimientos de piernas. Transcripción del autor: Martinez, M., Villagra, F., Loayza, F., Vidorreta, M., Arrondo, G., Luis, E., ... & Pastor, M. A. (2014). MRI- Compatible Device for Examining Brain Activation Related to Stepping. IEEE transactions on medical imaging, 33(5), 1044-1053.
  • 2. 1. Introducción: La locomoción humana es una tarea sensorimotora compleja que implica la interacción dinámica de músculos que actúan sobre diferentes articulaciones de las extremidades, generadores locomotores espinales y una red jerárquica coordinada por estructuras nerviosas distribuidas a lo largo del tronco-encéfalo, cerebelo, ganglios basales y corteza cerebral. Esta red controla el movimiento y el equilibrio mediante una integración de información multisensorial que permite adaptar nuestro patrón locomotor con precisión, velocidad y versatilidad extraordinaria y acorde a las condiciones específicas ambientales (revisión en Rossignol et al., 2006). El estudio de la locomoción con resonancia magnética funcional (RMf) se ve obstaculizado debido a la dificultad de permanecer de pie en un escáner de alto campo magnético que permita el registro de la actividad cerebral evocada por el stepping, y la naturaleza de la tarea en sí misma. Para abordar esta limitación, varios enfoques han sido propuestos para proporcionar una evidencia indirecta de la participación cortical en la locomoción. Estos enfoques van desde la exploración de los patrones de actividad cerebral durante acciones imaginadas como estar de pie, caminar y correr (Miyai et al., 2001; Jahn et al., 2004; Sacco et al., 2006; Bakker et al., 2007; La Fougere et al., 2010), a la evaluación las áreas cerebrales activas durante la realización de movimientos pasivos y voluntarios dentro del escáner. Esto último ha sido estudiado desde diversos niveles de complejidad: desde la evaluación de movimientos unilaterales y repetitivas aislados de tobillo y rodilla (Debaere et al., 2001; Dobkin et al., 2004; Sahyoun 2004; Kapreli et al., 2006; Newton et al., 2008; Francis et al., 2009; Woolley et al., 2010) a tareas más complejas que requieren movimientos coordinados de múltiples articulaciones como pedalear (Mehta et al., 2009) o stepping (Hollnager et al., 2011; Toyomura et al., 2012). Si bien los estudios de neuroimagen basados en acciones locomotora imaginadas no están afectados por artefactos relacionados con el propio movimiento, éstos han proporcionado información valiosa a pesar de que no permiten una evaluación directa de la actividad neuronal asociada con movimientos reales. Por otro lado, los movimientos alternantes (anti- fase) y repetitivos de las extremidades inferiores requieren la coordinación entre las piernas, mecanismo empleado también durante la locomoción y por lo tanto se han propuesto como una modelo clínico de la marcha (Miyai et al., 2001). Las ventajas de este enfoque radica en que los movimientos de stepping se pueden realizar en una posición supino, lo cual el estudio de su activación cerebral evocada con medios como la RMf o el PET, dado que el movimiento de cabeza es minimizado (Mehta et al., 2009; Hollnager et al., 2011). La medida cuantitativa del movimiento es crucial en diseños experimentales de RMf que incluyen tareas motoras (Ashe et al., 1994) dada la correlación existente de la actividad cerebral y los cambios dependientes del movimiento (Rao et al., 1996). Hasta la fecha, los paradigmas motores que involucran a las extremidades inferiores no cuantifican la conducta que subyace bajo la actividad cerebral. Los cambios en la intensidad de la señal de cualquier vóxel que surgen del movimiento de cabeza representan un desconcierto en RMf, especialmente durante estudios de control motor. Para reducir el movimiento de cabeza relacionado con la tarea, se ha sugerido el uso de dispositivos compatibles con la RMf como un medio exitoso para evaluar la conducta motora al mismo tiempo que facilita movimientos aislados en las extremidades de interés con un movimiento de cabeza mínimo (Newton et al., 2008). Otra estrategia empleada para evitar excesivos artefactos relacionados con el movimiento de cabeza, es la evaluación de la actividad cerebral en el periodo de descanso posterior a la ejecución motora
  • 3. (Mehta et al., 2009). Para generar movimiento rítmico, a menudo se emplea un estímulo externo auditivo o visual para guiar al participante (Debaere et al., 2001; Sahyoun et al., 2004; Ciccarrelli et al., 2005; Toyomura et al., 2012) En este trabajo, presentamos un dispositivo personalizado de pseudomarcha compatible con la RMf que facilita la realización de movimientos bilaterales y alternantes de las extremidades inferiores dentro de orificio del escáner. Hemos empleado RMf dependiente del nivel de oxígeno sanguíneo (del inglés BOLD, Blood Oxygen Level Dependent) para evaluar el patrón de actividad cerebral asociada con la realización de esta tarea en un grupo de sujetos sanos. El dispositivo de pseudomarcha se empleó para restringir el movimiento a las articulaciones de interés mientras registraba simultáneamente el movimiento realizado por los sujetos. Una guía visuo-espacial fue diseñada para facilitar la generación de movimientos al ritmo preestablecido, mientras la elección de la amplitud del movimiento fue diseñado como un parámetro libre que el sujeto seleccionaba de acuerdo a su propio confort. La medición simultánea de parámetros cinemáticos de las extremidades inferiores, en términos de amplitud y frecuencia, nos permitió establecer relaciones directas entre la señal BOLD y la conducta motora concurrente.
  • 4. 2. Materiales y Métodos: 2.1. Instrumentación: 2.1.1. Dispositivo de pseudomarcha compatible con la RM: Diseñamos y manufacturamos un dispositivo portátil con el objetivo de facilitar la ejecución de movimientos alternantes de las extremidades inferiores durante escaneo de RMf (Figura 1). Durante su construcción se incluyó metal no magnético y plástico (materiales compatibles con el entorno de RMf) con un peso total de 12 kg. Su diseño estructural consiste en una cinta de marcha vertical conectada a una plataforma triangular de metacrilato. La cinta de marcha se compone de una estructura con forma de arco que contiene dos columnas de rodillos independientes. La posición de la estructura es ajustable a lo largo de la camilla de exploración de acuerdo a la altura del sujeto. La plataforma triangular fue diseñada para limitar el movimiento a las articulaciones de interés. De este modo, ayudaba a los sujetos a realizar movimientos de stepping voluntarios evitando movimientos de cadera mientras permanecían en posición supino. Además, incluía un soporte personalizado para acomodar ambos tobillos (Figura 1b). El dispositivo permitía la medición del ángulo rotado por cada rodilla (knee angle, or alpha) y del desplazamiento angular (D) producido por los pies durante su contacto con los rodillos en la fase de apoyo (Figura 1c) por medio de dispositivos electrónicos (uno para cada pierna). Figura 1. a) Set-up del dispositivo de marcha compatible con RM con un sujeto en posición supino situado en la tabla del escáner, b) dimen- siones y componentes y, c) diagrama de diseño mostrando los principios operacionales. Medida de α: cuatro potenciometros de cable (UniMeasure LX-PA2.8-L1M, con una linearidad Full-Scale de +-1%) fueron fijados a la plataforma triangular en la distancia más lejana del centro del escáner para minimizar su efecto en la señal de la RM. Dos cintas de velcro fueron localizadas alrededor de los tobillos de los sujetos. Los finales libres de los potenciómetros de cable se los dos potenciómetros de cable se ataban a la cinta de velcro izquierda en el punto p (Figura 1c), y los dos cables restantes se ataban a la extremidad derecha del mismo modo. Cuando un desplazamiento de pierna se producía, el punto p describía una trayectoria circular centrada en la rodilla del sujeto. Para cada extremidad, los cables se desplazaban desde el punto p al potenciómetro correspondiente pasando a través de dos fulcros (f1 y f2), los cuales estaban fijados a la estructura de aluminio en el plano que contiene la pierna. Cuando p cambiaba su posición, los potenciómetros medían las distancias d1 y d2 -desde f1 y f2 a p-. Una vez conocidas las distancias d1 y d2, las coordinadas x e y de p se calculaban (Taubin et al., 1991).
  • 5. Una medida directa de alpha se computaba a partir de las coordenadas cartesianas de p (px y py) por medio de una función circular (ver Ecuación 1 y Figura 1c para más detalles). x y p p tg =α (1) La medida de alpha no dependía de la posición de los puntos de fijación, por lo que las cintas de velcro podían ser colocadas en cualquier posición cerca de los tobillos de los sujetos. Medida de D: la cinta de marcha contenía dos columnas de diez rodillos cilíndricos por columna manufacturados con cestileno. El radio de cada rodillo era de 3 cm. Cuando un movimiento se realizaba en una de las columnas, los rodillos de ese lado giraban juntos porque estaban conectados con cintas de uretano. Cuando el movimiento finalizaba, los rodillos se paraban instantáneamente debido a la fricción del sistema de cintas. El cambio en posición producido por cualquier movimiento en cada columna de rodillos se registraba en un encoder óptico incremental (Hewlett Packard HEDS-5540 de 10 bits de resolución). Para convertir los valores registrados por los encoder y obtener así una medida espacial (desplazamiento angular, D en cm), la cuenta registrada con ambos sensores durante una vuelta se aproximó al perímetro del rodillo. Los únicos componentes eléctricos del dispositivo eran los sensores y dos cables apantallados que conectaban los sensores al sistema de adquisición del dispositivo, localizado fuera de la sala del escáner. Los datos digitalizados de los sensores del dispositivo se filtraron con un filtro de Butterworth paso bajo de 5º orden con una frecuencia de corte de 5 Hz. El sistema de adquisición convertía las salidas eléctricas del dispositivo de pseudomarcha a señales digitales a una frequencia de muestreo de 50 Hz a través de una tarjeta de adquisición de datos PCI (Sensoray Modelo 626) instalada en un PC. Finalmente, el PC ejecutaba un script personalizado implementado en MAtlab (R2009b, The Mathworks Inc., Natick, MA, USA) el cual estaba ejecutaba un diseño modelado en bloque en tiempo real con la Toolbox Real-Time Simulation para Simulink (Simulation and Model Based Design Toolbox). Ambas herramientas permitieron una medición y descripción de la conducta cinemática mediante las series temporales de alpha y D. Durante la sesión de escaneo, el sistema de adquisición se sincronizaba con secuencia de RMf por medio un disparador óptico. Información sobre medidas de consistencia chequeadas son descritas en Material Suplementario, Sección 1. 2.1.2. Set-up y operación: Una vez dentro del escáner, los sujetos permanecían supinos en la tabla de la RM, con ambos muslos emplazados en la plataforma triangular del dispositivo de pseudomarcha con las rodillas flexionadas (aproximadamente 45º) y los talones apoyados en su soporte (Figura 1). Unas almohadillas arqueadas fueron colocadas en los talones de los sujetos para evitar movimiento artefactual cuando los sujetos apoyaban los pies en el soporte. Para minimizar el movimiento de cabeza, se colocó una almohada hichable (Siemens Cushion Head 4765454) en la cabeza de los sujetos, así como cintas elásticas con Velcro sobre los muslos y caderas. Se solicitó a los participantes la ejecución de movimientos de stepping, donde cada paso de una extremidad comprendía un componente vertical ascendente y otro descendente. El movimiento ascendente estaba compuesto por una dorsiflexión inicial del tobillo para evitar el contacto del pié con los rodillos, simultáneo con una extensión progresiva de la rodilla. Una vez la rodilla alcanzaba la máxima extensión, la suela del pié contactaba con los rodillos iniciando el movimiento descendente, el cual era iniciado por una flexión plantar del tobillo acompañado con una flexión progresiva de la rodilla. Durante el movimiento descendente, el contacto del pie con los rodillos se mantenía hasta que la rodilla alcanzaba la posición de máxima flexión,
  • 6. implicando la oscilación de esa extremidad y el inicio de un nuevo paso. Los movimientos se restringieron al plano sagital (vertical). 2.1.3. Estudio de compatibilidad: Dado que la instrumentación de RM y la operación del sujeto con el dispositivo (movimiento relacionado con la tarea) genera dificultades técnicas y de calidad de imagen, su influencia en el entorno de RM debe ser testeado previamente. Hasta la fecha, las medidas de evaluación típicas de calidad de imagen en RM incluyen la substracción de imagen y comparación de la relación señal a ruido (SNR) entre las diferentes condiciones. En cuanto a las medidas de SNR, dos variantes son frecuentemente empleadas. Las medidas de relación señal a ruido espacial (sSNR) miden relación de señal de imagen estática sobre ruido de fondo; sin embargo no proveen más detalles acerca de las características de la serie temporal de fMRI. Por otro lado, la relación señal a ruido temporal (tSNR) es una medida útil de estabilidad de la intensidad de la serie temporal de la señal capaz de detectar ruido temporal de baja frecuencia y falsas señales de fMRI (Yu et al., 2011). En el caso de estudios de neuroimagen, es habitual obtener una medida de la sSNR comparando la señal dentro y fuera de un phantom radiológico. Específicamente, la sSNR se define como: airSD S sSNR × = 655.0 (2) donde, S es la señal media en una región de interés (ROI) emplazada en el centro del phantom y SDair es la desviación estándar de la señal fuera del phantom. 0.655 es un factor de corrección debido a las características de distribución del ruido (Kaufman et al., 1989). La sSNR se evaluó para cada imagen de la serie temporal. La tSNR se formula para una serie temporal de imagen como el radio de la señal media sobre su desviación estándar temporal. La tSNR se calculó para cada vóxel dentro de la ROI central del phantom. seriestimevoxel seriestimevoxel SD S tSNR __ __ = (3) Se realizó un estudio de compatibilidad en el que series temporales de 50 volúmenes de imágenes eco planares (EPI)* fueron adquiridas de un phantom esférico lleno de agua destilada (Siemens D170 de 170 mm de diámetro) en cuatro condiciones diferentes: Condición p1: Phantom solo (condición de línea base), con el dispositivo situado fuera de la sala del escáner; Condición p2: phantom con el dispositivo localizado en la tabla del escáner (sin efecto del movimiento); Condición p3: phantom con el dispositivo localizado en la tabla del escáner y una persona movimento los rodillos y las cintas de velcro al ritmo preestablecido. Condición p4: phantom sólo (segunda condición de línea base). • Los parámetros de la secuencia EPI durante el estudio con phantom fueron idénticos a los empleados durante el estudio fMRI que son descritos en la sección 2.2.2.
  • 7. Para minimizar los cambios en el entorno de la sala de escaneo, todas las condiciones experimentales fueron registradas en la misma sesión y sin mover ni la tabla del escáner ni el phantom entre las condiciones. Para estimar el efecto de la introducción del dispositivo en el entorno de RM, su movimiento y las inestabilidades del escáner, evaluamos las diferencias en las imágenes promedio de cada condición (realizando una resta directa entre vóxels de la condición p1 respecto a las condiciones p2, p3 and p4) y cuantificamos el porcentaje de cambio en brillo en las imágenes diferencia. También determinamos la sSNR y tSNR de cada condición. Los resultados fueron comparados en Matlab (R2009b, The Mathworks Inc., Natick, MA, USA) con un test de Kruskal-Wallis. 2.2 Estudio de RMf 2.2.1. Sujetos Diecinueve voluntarios diestros (Oldfield, 1971) -9 mujeres; edad 33 ± 5 años, altura 168 ± 8 cm, peso 69 ± 12 kg; media ± DS- sin historial de alteración neurológica, motora o cardiovascular fueron reclutados entre el personal de la Universidad de Navarra. Antes de su participación, todos los sujetos firmaron un consentimiento informado. 2.2.2. Protocolo de escaneo El estudio fue llevado a cabo en un escáner de 3T (Siemens Trio TIM, Siemens AG, Erlangen, Alemania) equipado con una bobina de cabeza con un array de 12 canales. Consistió en una sesión que incluía la adquisición de una secuencia anatómica y otra funcional, con una duración de 15 minutos. La imagen anatómica T1 fue adquirida con una secuencia MPRAGE de 5 minutos de duración. Los siguientes parámetros fueron empleados: 1mm resolución isotrómica, campo de visión (FOV) = 256 x 192 mm2, matriz = 256 x 192 voxels, 160 slices axiales, tiempo de repetición / tiempo de eco (TR/TE) = 1620/3.09 ms, tiempo de inversión (TI) = 950 ms, ángulo flip=15º. Durante la serie funcional, un total de 240 volúmenes sensitivos a contraste BOLD fueron adquiridos empleando una secuencia EPI T2*. Cada volume comprendía 36 slices transversales de 4 mm de grosor con un hueco de 0.2 mm. Otros parámetros de interés fueron: resolución = 3 x 3 mm2, FOV = 192 x 192 mm2, matriz = 64 x 64 voxels, TE = 24 ms, TR = 2.0 s. 2.2.3. Paradigma funcional El paradigma motor intercalaba bloques de zancadas alternantes voluntarias de las piernas de 10 s (condición de stepping, o SC) y bloques de reposo de 30 s (condición control o CC). Una guía visual externa fue incluida para asistir a los sujetos en la consecución de un patrón rítmico. Las guías (pistas) consistían en dos huellas que se movían vertical y alternativamente a 1.2 Hz. La secuencia comenzaba con el pie derecho, mientras cada huella revertía su trayectoria al alcanzar los puntos superiores e inferiores (Figura 2). Finalmente, tras 5 repeticiones, uno de las guías no finalizaba su correspondiente zancada, volviendo a su posición inicial e indicando al participante que el bloque estaba finalizando. La video-animación fue generada en Adobe® Flash® Professional (http://www.adobe.com/products/flash.html) y proyectada en una pantalla que era visible gracias a un espejo colocado sobre la bobina de cabeza de los participantes.
  • 8. Una cruz de fijación aparecía en el centro de la pantalla justo antes del inicio de SC, indicando que el bloque de stepping estaba a punto de comenzar. Durante SC, los sujetos realizaron los movimientos de stepping ayudados por el dispositivo de pseudomarcha y la guía visual. Además, los participantes eran libres de seleccionar la amplitud de sus pasos. Durante CC, los sujetos fueron instruidos para relajarse manteniendo los ojos abiertos y los pies en el soporte del talón del dispositivo. Para minimizar los efectos visuales de no interés en la actividad cerebral, el estímulo visual fue mantenido en ambas condiciones (con la excepción del color, el cual era blanco en SC y amarillo en CC). Cada condición se repitió 12 veces con una duración total de 8 minutos. Datos de un Eye-Tracker fueron registrados simultáneamente para controlar la atención y el sueño. Previo a la sesión de escaneo, los sujetos practicaron el paradigma fuera y dentro del escáner hasta conseguir un patrón coordinado confortable en las extremidades inferiores. Los investigadores explicaron la importancia de mantener la cabeza lo más quieta posible dentro del escáner. Durante el registro de RMf, las medidas de α y D fueron registradas continuamente. 2.2.4. Análisis de datos 2.2.4.1. Análisis de datos cinemáticos. La Tabla 1 describe las características cinemáticas de la conducta motora mostrada por los participantes, la cual fue estimada a partir de los perfiles temporales de α y D. Primero, se identificaron los tiempos de flexión y extensión de las rodillas izquierda y derecha, a partir de los picos de los perfiles temporales de α. La frecuencia de stepping de la rodilla (SFk, en Hz) se definió como la inversa del tiempo entre extensiones sucesivas de las rodillas. La amplitud de stepping (SA, en grados) se computó como la suma de los ángulos de extensión y flexión de cada paso. Además, un coeficiente de asimetría (AC), fue definido como la relación espacial entre las SAs derecha e izquierda. Este parámetro refleja diferencias angulares entre los desplazamientos de las rodillas, por lo que en un movimiento totalmente simétrico, el AC debería resultar 1. Finalmente, la extensión total de movimiento (TEM, en grados) se computó como al suma de los SAs izquierdo y derecho a lo largo de un bloque SC. Figura 2. Paradigma motor empleado en el studio con una guía visuo-espacial indicando la evolución del patron especial de las guías en el plano sagittal. La frecuencia de stepping empleada en este estudio es equivalente a un periodo de 0.83 s.
  • 9. Después, las características temporales de los pies se extrajeron del perfil temporal de D. La velocidad de los rodillos se derivó de D, lo cual permitió identificar los contactos iniciales de cada pie con el sistema de rodillos así como su separación de los rodillos tras dar un paso. La duración de stepping de los pies se calculó como el tiempo transcurrido entre contactos sucesivos de los pies con los rodillos, y la frequencia de stepping de los pies (SFf, en Hz) se define como la inversa de la duración de stepping de los pies. Todas las medidas de los parámetros fueron calculados durante todos los bloques SC y promediados empleando scripts personalizados en Matlab. Característica Acrónimo Unidad Descripción Frecuencia de stepping de las rodillas SFk Hz Frecuencia entre extensiones sucesivas de las rodillas a lo largo de un bloque SC. Amplitud de stepping SA grados Ángulo total rotado por cada rodilla (extension + flexion) durante un paso Coeficiente de asimetría AC - Relación entre SAs de la rodilla derecha e izquierda Total extent of movement TEM grados Desplazamiento total a lo largo de un bloque SC (suma de SAs derecha e izquierda) Frecuencia de stepping de los pies SFf Hz Frecuencia de los conctactos sucesivos de los pies con los rodillos durante un bloque SC. Tabla 1. Descripción de las características cinemáticas evaluadas durante la conducta motora. Los últimos dos movimientos correspondientes al final de cada SC fueron descartados debido a que no eran pasos completes. Los parámetros cinemáticos fueron promediados a lo largo de los bloques SCs para obtener una medida representativa para cada sujeto. Dado que los sujetos seleccionaban su SA preferida, llevamos a cabo un análisis de regresión múltiple en Matlab para determinar si esta característica correla con alguna de las características demográficas (sexo, edad, altura y peso) de la población. Un p-valor de p < 0.05 fue considerado como estadísticamente significativo. 2.2.4.2. Análisis de datos de neuroimagen 2.2.4.2.1. Preprocesado El preprocesado y análisis de datos fueron realizados empleando la herramienta Statistical Parametric Mapping (SPM8) (Statistical Parametric Mapping software, SPM: Wellcome Department of Imaging Neuroscience, London, UK; http://www.fil.ion.ucl.ac.uk/spm/) y scripts personalizados implementados en Matlab. Para cada sujetos, los volúmenes EPI fueron realineados al volumen central de la sesión con el algoritmo de realineado de SPM8 (Friston et al., 1996). La herramienta Artifact Repair toolbox (versión 5, Mazaika et al., 2009) fue empleada para detectar y eliminar artefactos de las imágenes realineadas. El umbral de movimiento fue 0.5 mm/TR y los volúmenes artefactuales fueron reemplazados por el promedio de los scans adyacentes. Decidimos a priori que una sesión con más del 10% de los volúmenes artefactadas sería descartada. Los datos realineados fueron coregistrados con la imagen anatómica individual y normalizados espacialmente a la plantilla MNI (Montreal Neurological Institute) basados en coordinadas ICBM-152 (Fonov et al., 2011) usando los parámetros determinados de la segmentación combinada y la normalización de la imagen anatómica (Ashburner et al., 2005)- Un filtro gausiano de 8 mm de FWHM (full width at half maximum) fue aplicado para suavizar espacialmente los datos.
  • 10. 2.2.4.2.2. Análisis estadísticos Para evaluar las diferencias de señal BOLD entre las condiciones, un análisis por inferencia estadística fue realizado en el contecto del Modelo General Lineal (GLM, del inglés General Linear Model, Friston et al., 1995). Análisis estadísticos voxel-wise fueron realizados para cada sujeto en un diseño de bloques que modelaba ambas condiciones SC y CC –empleando una función boxcar convuelta con la función de respuesta hemodinámica- tras suavizar los volúmenes temporalmente con un filtro paso alto de 0.008 Hz para eliminar los desplazamientos lentos de señal con un periodo mayor de 128 segundos que están relacionados con ruido del escáner y fisiológico. Los parámetros de movimiento extraidos del realineado no fueron incluidos en la matriz de diseño para evitar el impacto deletéreo en la sensitividad cuando el movimiento y el diseño experimental están correlados (Johnstone et al., 2006). El contraste de interés SC > CC fue estimado individualmente con un modelo fixed-effects seguido de una inferencia de grupo con un modelo random effects (Penny et al., 2004). Para evaluar el efecto de incorporar en el análisis los datos cinemáticos pertenecientes a la ejecución concurrente de los sujetos, este análisis fue replicado incluyendo como covariable a nivel de sujeto el TEM realizado durante cada bloque SC. El hecho de introducir esta covariable permitió controlar las posibles variaciones de conducta motora entre bloques. Un análisis final a nivel de grupo fue realizado incluyendo como regresores la media y varianza de la SA de cada sujeto, además de los mapas de activación de los contrastes SC > CC pertenecientes al primer nivel. El objetivo de la primera covariable era estudiar la actividad neural correlacionada con los distintos desplazamientos individuales de las extremidades inferiores, mientras las varianza se añadió como variable de no-interés. Dos t-mapas de grupo fueron generados para, (1) examinar la actividad relacionada con el stepping (SC > CC), y (2) testear la activación positivamente correlacionada con la SA mediante un t-test de una muestra para el parámetro de contraste específico de la matriz de diseño. Un p-valor de p < 0.05 (corregido por FDR a nivel de clúster) fue empleado para corregir por múltiples comparaciones, tras un umbralizado a nivel de voxel de p < 0.001 (T = 3.69) sin corregir.
  • 11. 3. Resultados 3.1. Estudio de compatibilidad La Figura 3 muestra los resultados de la prueba de compatibilidad en la cabeza del phantom. En la Figura 3a, las imágenes medias de las condiciones experimentales p1, p2, p3 and p4 son dibujadas en las dos columnas de la izquierda, mientras la tercera columna muestra la diferencia de intensidad entre ambas condiciones resultante de una resta directa de los vóxels de ambas condiciones. Observamos un 2.5%, 1.9% y 3.07% de cambio en el promedio de intensidad entre condiciones ‘p2’ y‘p1’ (Figura 3a, primera fila), ‘p3’ y ‘p1’ (Figura 3a, segunda fila) y ‘p4’ y ‘p1’, (Figura 3a, cuarta fila), respectivamente. Cuando comparamos las condiciones ‘p2’ y ‘p3’para estimar el efecto del movimiento (realizado a una distancia del phantom) (Figura 3a, tercera fila), observamos un cambio en el brillo medio de 0.9%. Estos cambios eran visualmente imperceptibles al mostrarlos en la escala de brillo original. Sin embargo, al aumentar la escala al 5% de su valor original, observamos cambios sistemáticos en brillo y un efecto de ghosting alrededor del contorno del phantom (Figura 3a, cuarta columna). La Figura 3b y 3c muestran los valores promedio y desviación estándar de las sSNRs y tSNRs calculados para cada condición. Los tests de Kruskal-Wallis evaluando las diferencias en sSNR y tSNR entre condiciones no llegaron a alcanzar significación (psSNR = Figura 3. Evaluación de la compatibilidad del dispositivo de pseudomarcha. a) Imágenes promedio del phantom durante las diferentes condiciones (p1: phantom solo (condición de línea base), p2: phantom con dispositivo, p3: phantom con dispositivo y una persona simulando movimiento de stepping y p4: phantom sólo (segunda línea base) y substracción a pares de las condiciones anteriores, mostradas a escala compoleta y 5% de escala. b) valores de la relación señal a ruido espacial (sSNR) para todas las imágenes de la serie temporal y, c) valores de la tSNR de los vóxels situados en la ROI central del phantom. No se encontraron diferencias significativas entre ninguna de las condiciones.
  • 12. 0.97 y ptSNR = 0.122). Los resultados indican que los cambios en la señal producidos por la introducción y la operación del dispositivo de pseudomarcha y las inestabilidades del escáner eran de relevancia despreciable. 3.2. Estudio conductual 3.2.1. Evaluación motora Los parámetros de movimiento registrados a partir del movimiento de rodillas y pies corroboran que los participantes fueron capaces de realizar los movimientos alternantes de las extremidades inferiores solicitados durante SC, con contactos precisos de los pies en la cinta de marcha del dispositivo de pseudomarcha (ver en Figura 4a y 4b una muestra del perfil temporal registrados en la rodilla (α) y el desplazamiento de los pies (D) de un sujeto representativo durante todas las SCs). Como se puede observar, los perfiles registrados reflejan el patrón de coordinación anti-fase durante la ejecución de la tarea, similar a la marcha. Observamos una elevada variabilidad inter-sujeto en la característica SA, con una media de grupo SA = 45.25 ± 17.21⁰ (Figura 4c), lo cual significa que cada individuo ajustó la SA de sus movimientos de acuerdo al ritmo de la guía visual. El promedio de grupo de las frecuencias de stepping de la rodillas y los pies fueron SFk =1.16 ± 0.06 Hz y SFf =1.15 ± 0.05 Hz, respectivamente (Figura 4d). Además, las rodillas y los pies mostraron una coordinación similar pero no igual durante el movimiento de stepping, como se refleja a través de la diferente variabilidad en la Figura 4d (más información en Material Suplementario 2). Estos resultados confirman que los participantes machearon el patrón impuesto por la guía visuo-espacial, con un ritmo preestablecido a 1.2 Hz. El valor de AC de grupo (parámetro que refleja la relación entre desplazamientos de la extremidad derecha e izquierda) resultó 1.06 ± 0.103 y el TEM fue 478.16 ± 30.1⁰. Finalmente, el análisis de regresión múltiple mostró una correlación negativa significativa (r = -0.42, p = 0.04) entre la SA y el peso de los sujetos (Figura 4e). Figura 4. a) Series temporales de α y b) D durante todos los bloques SC (sobre-impuestos) de un sujeto representative (las curvas rojas y azules representan los desplazamientos derecho e izquierdo, respectivamente), c) amplitude de stepping individual (SA), d) diagramas de cajas de la frecuencia de stepping durante las tareas en los pies (SFf) y rodillas (SFk) y e) correlación lineal negativa entre SA y el peso.
  • 13. 3.2.2. Actividad neural asociada con el stepping Stepping vs rest El movimiento de cabeza permaneció por debajo de los 3 mm para todos los sujetos (más detalles en Material Suplementario 3). Por lo tanto, ningún sujeto ni sesión fueron descartados del estudio debido a un excesivo número de artefactos por movimiento de cabeza. A nivel de grupo, la inclusión del TEM como covariable resultó en un aumento de la significación en los mapas de contraste obtenidos (SC > CC). Adicionalmente, la significación estadística del mapa de contraste de grupo resultante fue también mayor al incluir la media de la SA de los sujetos y la varianza como covariables en el análisis de grupo. Los resultados muestran que la red cerebral activada por el stepping incluye bilateralmente a la corteza motora primaria (M1), corteza premotora (PMC), área motora suplementaria (SMA) y corteza cingulada medial (MC), corteza somestésica primaria y secundaria, y áreas en el lóbulo parietal inferior (IPC) y lóbulo parietal superior (SPL), incluyendo precuneus. Activaciones subcorticales significativas fueron también encontradas bilateralmente en el putamen (más en el hemisferio izquierdo) y en la corteza cerebellar somestésica vermiana y hemisférica (Figura 5 e información detallada en la Tabla 2). Figura 5. Regions of the brain activated during the stepping task, superimposed on a two-(top) and three-dimensional (bottom) standard brain. Signal changes were considered significant at p < 0.001 and corrected for multiple comparisons by FDR at the cluster- level (k = 130). X: cluster not surpassing the threshold for multiple comparisons. The color scale represents statistical T-values. Region Tamaño clúster (Voxels) Lado Coordenadas MNI X Y Z Stat. val. T Lóbulo paracentral (BA4) 28225 D 6 -25 63 18.19 I -6 -27 63 16.74 Giro precentral (BA4a) D 15 -30 69 16.69 Giro frontal superior (BA6) D 23 -9 60 12.66 Giro supramarginal (BA48) 3426 I -54 -25 15 10.74 Giro temporal superior (BA22) I -61 -21 12 4.71 Giro supramarginal (BA2) 3401 D 56 -30 31 11.14 Sulco intraparietal (BA40) D 36 -39 40 6.50
  • 14. Giro precentral (BA4) 1135 D 51 8 31 6.49 Giro frontal inferior, p. Opercularis (BA48) D 53 9 9 5.61 Vermis cerebelar (lóbulos I-IV (Hem)) 400 D 2 -48 -14 6.14 Hemisferio cerebelar (lóbulo V) I -21 36 -27 5.57 Hemisferio cerebelar (lóbulos I-IV) I -11 40 -21 4.62 Putamen 224 I -26 -4 10 5.64 Cerebelo (lóbulo V) 130 D 24 -36 -29 5.20 Giro precentral (BA6) * 105 I -57 4 24 6.43 Insula (BA13-16) * 82 I -45 0 7 4.56 Giro frontal medio (BA46) * 76 D 35 47 22 4.61 Opérculo rolándico (BA48) * 58 I -56 8 3 4.83 Putamen * 54 D 27 3 7 4.17 Giro frontal inferior, p. Opercularis (BA6) * 30 I -57 8 13 4.08 Tabla 2. Coordinadas MNI de las áreas anatómicas que muestran máximos de activación en el análisis de grupo relacionado con stepping. Los cambios en la señal fueron considerados significativos con un p-valor de p < 0.001 y corregido por múltiples comparaciones por FDR a nivel de clúster (k = 130; D, derecho, I, izquierdo; BA, Brodmann Area). * Estas áreas fueron observadas a at p<0.001 sin corregir, sin embargo, debido a su tamaño de clúster, los valores no sobrevivieron a la corrección. Actividad cerebral correlada con la amplitud del paso El mapa de contraste resultante del análisis de grupo mostró actividad positivamente correlada con la SA en varias regiones, incluyendo las cortezas visuales primaria y asociativa bilateralmente, y giro lingual, el complejo temporal medio (hOC5/V5); el giro superior postcentral derecho, el córtex cingulado medial derecho, PMC bilateralmente y SMA del lado derecho, el giro precentral derecho, el opérculo rolándico derecho, el córtex prefrontal dorsolateral izquierdo, el núcleo caudado derecho y el putamen dorsal bilateralmente (Figura 6 y más detalles en Tabla 3). Figura 6. Regiones cerebrales asociadas con la SA. Los cambios de la señal BOLD fueron considerados significantes a partir de un p-valor p < 0.001 y corregidos por múltiples comparaciones con FDR a nivel de clúster (k = 172). La escala de color representa valores-T estadísticos,
  • 15. mientras que las gráficas superiores y posteriores representan la correlación positiva entre la señal BOLD y SA en regiones cerebrales de interés. Región Tamaño clúster (vóxels) Lado Coordenadas MNI X Y Z Stat. val. T Giro lingual (BA18) 2746 D 12 -58 0 7.14 Giro temporal inferior (BA19) D 42 -70 -5 5.39 Giro temporal medio (BA37) D 41 -69 13 5.25 Giro fusiforme (BA19) D 30 -66 -9 5.16 Giro calcarino (BA17) D -9 -70 16 4.75 Giro frontal superior (BA6) 1594 D 18 -18 58 6.20 26 -9 70 6.06 14 11 48 4.64 Giro frontal superior (BA8) D 17 15 60 4.79 Giro frontal medio (BA8) D 32 6 57 4.63 Giro precentral (BA4) 1037 D 18 -30 70 5.98 Giro postcentral (BA3) D 33 -34 63 5.37 Sulco intraparietal (BA40) D 39 -36 39 4.86 D 39 -34 46 4.83 Opérculo rolándico (BA48) 553 D 53 0 15 6.00 Putamen 325 I -20 8 13 5.23 Giro inferior frontal, p. Opercularis (BA48, BA45) 306 D 39 14 15 5.16 Nucleo caudado D 21 15 12 4.73 Corteza cingulada posterior (BA27) 295 D 2 -38 9 7.22 Lóbulo parietal superior (BA5M) 233 D 11 -55 53 5.23 Lóbulo parietal superior (BA7A) D 15 -57 59 3.94 Sulco intraparietal (BA19) D 21 -52 40 4.10 Giro frontal medio (BA47) 184 I -29 45 19 4.80 Giro lingual (BA19) 172 I -18 -58 -3 5.28 Tabla 3. Coordinadas MNI de las áreas anatómicas mostrando correlación positiva con la SA. Las correlaciones se considerán significante a un p-valor < 0.001, corregido por múltiples comparaciones por FDR a nivel de (k = 172; D, derecho, I, izquierdo). 4. Discusión Hemos diseñado y testeado un paradigma motor de RMf durante el cual medidas de actividad cinemática y BOLD asociada con movimientos voluntarios alternantes de las extremidades inferiores fueron registradas concurrentemente en sujetos sanos. Una cinta de marcha vertical personalizada fue empleada en combinación con una guía visuo-espacial externa para facilitar la sincronización del movimiento con el ritmo requerido durante la tarea. Los movimientos de stepping fueron registrados y cuantificados, permitiendo evaluar la una correlación entre la amplitud del movimiento y la actividad BOLD evocada. Nuestros resultados demuestran que los movimientos de stepping generan activaciones cerebrales bilateral en varias areas corticales y subcorticales que están relacionadas con la ejecución y el control motor (ver Figura 5 y Tabla 2). 4.1. Dispositivo de pseudomarcha En cuando a la compatibilidad magnética, minimizamos el impacto en el campo magnético construyendo el dispositivo principalmente de materiales no ferromagnéticos. Hemos empleado métodos estándar para evaluar la compatibilidad magnética, los cuales indicaron que el dispositivo de pseudomarcha no alteraba significativamente el entorno magnético mientras restringe los movimientos de stepping a las articulaciones de interés con un movimiento limitado de la cabeza. En Hollnager et al., 2011, se presenta un dispositivo el cual permite la generación y la medida de fuerzas activas y pasivas relacionadas con movimientos de stepping. Ambos estudios representan herramientas valiosas que muestran la viabilidad de los dispositivos compatibles en estudios de RMf de las extremidades inferiores.
  • 16. 4.2. Cinemática Los resultados revelaron que los participantes siguieron los movimientos guiados visualmente mediante desplazamientos adecuados y precisos al ritmo requerido (Figura 4d), mostrando un patrón de coordinación anti-fase en las extremidades inferiores (Figura 4a, 4b y Material Suplementario 3). La cadencia de los pies no fue totalmente síncrona con las extensiones de las rodillas, por lo que las correcciones de la rodilla durante los pasos consecutivos no estaban completamente sincronizadas con el desplazamiento de los rodillos. Esto sugiere, que pesar de una relación cercana entre las extremidades del mismo lado, existe cierta autonomía entre el movimiento de la rodilla y de los pies. Por otro lado, la opción de seleccionar libremente la amplitud del movimiento resultó en diferencias en la SA entre los sujetos (Figura 4c) y por consiguiente también en el TEM. El valor de la SA resultó correlacionado con el peso de los sujetos pero no con la altura. La falta de correlación con la altura podría explicarse por el ajuste del dispositivo de pseudomarcha con la altura individual en la tabla del escáner y por ser la unidad de medida angular. La correlación negativa con el peso (Figura 4e) podría ser debido al hecho de estar en posición supino y podría reflejar fuerzas gravitacionales que podrían hacer la tarea más fatigosa para aquellos de mayor peso. Sin embargo, la longitud de la zancada también varía entre individuos en marcha normal (Hausdorff et al., 2001). Por tanto sería interesante evaluar en estudios futuros si las diferencias en las medidas experimentales reflejan diferencias inter-individuales en marcha normal. La marcha humana es considerada simétrica (Sadegui, 2000) y está caracterizada por un movimiento cíclico gobernado por un patrón de coordinación anti-fase entre ambas extremidades. La información sensorial derivada de los movimientos alternantes de las piernas también contribuye a la generación y coordinación de los músculos durante la actividad locomotora (Kawashima et al., 2005). De este modo, nuestro estudio incorpora movimientos simétricos con un patrón de coordinación anti-fase realista entre ambas piernas, dado que la interacción con el dispositivo comprende funcionalidad de las rodillas, tobillos y pies, dando lugar a feedback somatosensorial relevante. Por tanto, la tarea presentada en este estudio estaba caracterizada por un movimiento bien aprendido que podría reflejar alto parecido con un patrón de locomoción. Sin embargo esta tarea, como un modelo de marcha, no está libre de limitaciones. El objetivo de la locomoción es soportar el cuerpo contra la gravedad a la par que generar movimientos que desplacen apropiadamente el cuerpo hacia delante (Winter, ,1995). Es complicado replicar con montajes de RMf estándar aspectos específicos de la marcha y de la estancia vertical, equilibrio, soporte postural y otros efectos gravitacionales e inerciales. Otros componentes de la marcha, como el control del tronco y caderas, o la coordinación de músculos gluteales y de las piernas con los brazos son aspectos que este diseño no contempla debido a las fijaciones del sujeto y a su posición. Hemos testeado en un estudio case algunas evidencisa entre el stepping vertical y supino con técnicas EEG y EMG (Material Suplementario 4). A pesar de diferencias notables entre nuestra tarea y la marcha real, el diseño con el dispositivo de marcha parece una herramienta adecuada para investigar aspectos de la marcha dentro de un entorno de RM. 4.3. Activación cerebral asociada al stepping La comparación entre las condiciones motoras y reposo (contraste SC > CC) reveló que el stepping activa una red cerebral que comprende las cortezas sensorimotora primaria y somatosensorial, SMA, PMC, CMA, los ganglios basales y el cerebelo (Figura 5 y Tabla 2). Los resultados están de acuerdo con estudios de neuroimagen previos los cuales han evaluado la actividad durante tareas de las extremidades inferiores unilaterales (Dobkin et al., 2004; Sahyoun et al., 2004; Ciccarelli et al., 2005, Newton et al., 2008; Wooley et al., 2010) y bilaterales (Mehta et al., 2009; Hollnager et al., 2011; Toyomura et al., 2012). El desplazamiento total (TEM) individual demostró ser una covariable de no interés útil que permitió normalizar los datos funcionales en los análisis estadísticos individuales y por lo tanto mejoró la significación estadística general de los mapas de
  • 17. activación grupales del análisis de efectos aleatorios (RFX). Esto enfatiza la importancia del uso de medidas cinemáticas cuantitativas en análisis con paradigmas motores en RMf. Hay una evidencia convergente sobre la implicación de una red organizada de estructuras neurales a nivel espinal y surpaespinal durante tareas coordinadas, en las cuales procesos dinámicos tienen lugar para asegurar una organización eferente e integración sensorial (Swinnen, 2002). Específicamente, M1, SMA y PMC han mostrado participar en aspectos de codificación relacionados con la preparación y ejecución durante movimientos secuenciales voluntarios y externamente guiados de las extremidades superiores (Ashe and Ugurbil, 1994; Dai et al., 2001; Swinnen, 2002). La activación del PMC ha sido descrita en paradigmas que incluyen movimientos rítmicos guiados a diferencia de movimientos rítmicos generados internamente, y podría estar relacionados con la planeación del movimiento (Wessel et al., 1997). Además, las áreas premotoras son cruciales en el procesado de señales visuales para la planeación de la acción (Hoshi and Tanki, 2006) y han sido directamente asociadas con un comportamiento coordinativo anti-fase: un estudio de PET que involucra movimientos coordinados de los dedos y el tobillo de extremidades opuestas propuso que un circuito neural común distribuido a lo largo de la corteza premotora dorsal derecha y la corteza parietal derecha estaba implicado en los movimientos anti-fase (de Jong et al., 2002). Por otro lado, las áreas premotoras y parietales posteriores medían aspectos perceptivos relacionados con la estimación de la distancia y la codificación espacial de localizaciones relativos con las partes del cuerpo, especialmente en referenciado egocéntrico (Vallar et al., 1999, Committeri et al., 2004). El CMC podría servir como un interfaz motor motivacional (Ball et al., 1999) dado que este áreas está implicado en aspectos de procesado intencionales del movimiento (Debaere et al., 2001). Últimamente, los ganglios basales (GB) y el cerebelo (CB) han sido relacionados clásicamente al control motor (Middleton and Strick, 2000). Se ha sugerido la participación de los GB en percepción temporal y codificación de intervalos temporales (Rao et al., 2001, Pastor et al., 2004). Por ejemplo, un estudio reciente que involucra movimientos alternantes coordinados de las piernas similares a nuestra tarea, sugiere un papel significativo de los GB, particularmente bajo condiciones de generación de ritmo interna (Toyomura et al., 2012). Las áreas que encontramos activadas durante el movimiento de piernas en el CB coinciden anatómicamente con la representación somatotópica de los pies en el cerebelo humano superior: un homúnculo upside-down ‘invertido?’ (Grodd et al., 2001). El CB está implciado en monitorización y optimización de movimientos mediante feedback sensorial (Juepner and Weiller., 1998), especialmente en aquellos que requieren coordinación visuo-motora (Stein and Glickstein, 1992); activación en la vermis ha sido observada en estudios de movimientos repetitivos de las extremidades inferiores tanto de forma auditiva como visual (Debaere et al., 2001, Sahyoun et al., 2004). En resumen, el contraste comparando las condiciones movimiento y reposo dio lugar a una activación funcional implicando a estructuras corticales y subcorticales en la ejecución motora y control de movimientos volutuntarios. Los resultados apoyan la utilidad y validez de la tarea como un modelo funcional de marcha. 4.4. Actividad cerebral relacionada con la Amplitud del Paso (SA) Se encontraron varias regiones cerebrales donde la señal BOLD mostró una relación lineal con el regresor cinemático SA (Figura 6 y Tabla 3). Una correlación positiva entre la señal BOLD y la SA implica que los sujetos con mayor amplitud del paso tienen una mayor actividad cerebral en determinadas áreas que aquellos con menor amplitud (Figura 6). Encontramos una correlación positiva entre la señal BOLD y la SA en varias áreas corticales y subcorticales, incluyendo bilateralmente a la corteza visual primaria y áreas extraestriales del lado derecho, el giro lingual, el complejo temporal medio derecho (hMT/V5+), la corteza cingulada posterior derecha, el precúneus, el SPL derecho, el IPL extendido al giro postcentral y el putamen anterior bilateral.
  • 18. La activación que encontramos en la corteza estriada (cortex visual primario) podría estar relacionada con el procesado visuo- atencional requerido para filtrar información relevante de la acción orientada a un objetivo así como con las demandas visuales durante la tarea (Corbetta and Shulman, 2002) mientras que las áreas extra-estriadas podrían estar relacionadas con la generación de predicciones visuales relevantes para controlar las acciones (Astafiev et al., 2004): el área temporal media hMT/V5+ es una región principalmente sensitiva al movimiento relacionada precisamente con el procesado del movimiento (Sunaert et al., 1999). Además, el procesado visuo-motor de relaciones espaciales egocéntricas podría estar mediado por áreas parietales superiores mediales, como el precúneus (Zaehle et al., 2003) y áreas en el sulco intraparietal, el cual ha mostrado una función central en el control de los ojos y la generación de atención visual (Bisley et al., 2003). Los resultados indican que los sujetos con mayor SA podrían estar realizando un mayor esfuerzo. Además, la percepción espacial somestésica egocéntrica ha sido relacionada con la conectividad entre el SPL derecho (incluyendo precúneus y giro supramarginal), el cortex dorsolateral prefrontal y el giro lingual (Loayza et al., 2011). Observamos participación de áreas subcorticales como el estriado bilateral, el cual ha sido relacionado con el control de la cantidad de movimiento (Turner et al., 1998). Interesantemente, el putamen dorsal, el cual corresponde somatotópicamente con la región de las piernas (Gerardin et al., 2003), estaba correlado con el regresor SA. Finalmente, cabe destacar la lateralización derecha encontrada en las activaciones. Generalmente se asume que el lcerebro muestra asimetrías funcionales entre sus hemisferios, por ejemplo, está demostrado que el hemisferio izquierdo domina el control motor en sujetos diestros mientras los circuitos parieto-frontales del hemisferio derecho están especializados en la atención y el procesado espacial. Nuestros resultados sugieren que los mecanismos de control visuo-motores y de control atencional podrían ser empleados para producir una conducta motora coordinada, la cual podría estar mediada por áreas estriadas, extra-estriadas y fronto-parietales. En conclusión, el uso de un dispositivo de pseudomarcha personalizado junto a la medida concurrente de la conducta motora del sujeto ha demostrado ser relevante para extraer imágenes BOLD sin artefactos que reflejan el movimiento real realizado por los sujetos dentro del escáner. Además, el diseño permitió un análisis detallado de la conducta individual basado en características cinemáticas. En general, la combinación del análisis cinemático y de RMf de la conducta a lo largo de la sesión de escaneo ofrece un gran potencial durante el estudio de los sistemas motores en el cerebro y sus desórdenes. 5. Agradecimientos Estamos muy agradecidos al Dr. Valencia, Dr. Alegre y Dr. Artieda por su asistencia durante los análisis de las grabaciones EEG y EMG (Material Suplementario 4). Este trabajo fue fundado por el FIMA de la Universidad de Navarra y por una concesión del FIS PI081949 y el Gobierno de Navarra ref. 342005.
  • 19. 6. REFERENCIAS [1] S. Rossignol, R. Dubuc, and J.-P. Gossard, “Dynamic sensorimotor interactions in locomotion,” Physiol. Rev., vol. 86, no. 1, pp. 89–154, Jan. 2006. [2] I. Miyai, H. C. Tanabe, I. Sase, H. Eda, I. Oda, I. Konishi, Y. Tsunazawa, T. Suzuki, T. Yanagida, and K. Kubota, “Cortical mapping of gait in humans: a near- infrared spectroscopic topography study,” Neuroimage, vol. 14, no. 5, pp. 1186–1192, Nov. 2001. [3] K. Jahn, A. Deutschländer, T. Stephan, M. Strupp, M. Wiesmann, and T. Brandt, “Brain activation patterns during imagined stance and locomotion in functional magnetic resonance imaging,” Neuroimage, vol. 22, no. 4, pp. 1722–1731, Aug. 2004. [4] K. Sacco, F. Cauda, L. Cerliani, D. Mate, S. Duca, and G. C. Geminiani, “Motor imagery of walking following training in locomotor attention. The effect of ‘the tango lesson’,” Neuroimage, vol. 32, no. 3, pp. 1441–1449, Sep. 2006. [5] M. Bakker, C. C. P. Verstappen, B. R. Bloem, and I. 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