Este documento trata sobre las cinco unidades básicas de la ecología (nicho ecológico, hábitat, ecosistema, biodiversidad y biosfera) y sus relaciones. Explica los diferentes tipos de ecosistemas como acuáticos, terrestres y híbridos, así como las leyes de la ecología según Barry Commoner. También define conceptos como bioindicadores y huella ecológica, y por qué son importantes para la sostenibilidad ambiental.

1. TRABAJO SÍNTESIS DE ECOLOGÍA
POR: ALEXANDER GIRÓN MONTAÑO
ING, PESQUERO
ASPIRANTE A MAESTRÍA
PRIMER SEMESTRE MAESTRÍA EN DESARROLLO SOSTENIBLE Y MEDIO
AMBIENTE
PROFESOR: JOSÉ GIRALDO RÍOS DUQUE
UNIVERSIDAD DE MANIZALES
MAYO, DE 2017

2. LAS RELACIONES ENTRE LAS CINCO UNIDADES BÁSICAS DE LA
ECOLOGÍA: NICHO ECOLÓGICO, HÁBITAT, ECOSISTEMA,
BIODIVERSIDAD Y BIOSFERA
La ecología como ciencia, estudia las relaciones entre los organismos bióticos y abióticos,
los cuales en la gran biosfera se relacionan para forman el gran conjunto denominado tierra,
en el que todos los seres vivos convergen en correlación con los elementos fundamentales
formando asociaciones por tipo de especies, las cuales en conjunto forman en la naturaleza
las poblaciones, dichas poblaciones al conseguir condiciones ambientales favorables que les
permitan establecerse y perpetuar su especie, interactúan con otras poblaciones de diversas
especie con formando en unos casos alianzas simbióticas favorables o competencia entre sí
por especio o alimento en un ecosistema determinado. En los ecosistemas interactúan los
organismos con su medio ambiente, en el que cada individuo o grupo desarrollan su nicho
ecológico con el objetivo de permanecer en el tiempo, se adaptan o se desplazan hasta
encontrar un hábitat favorable.
Las relaciones entre los distintos grupos de especie (poblaciones) que comparten
características similares en un área determina, conforman las comunidades las cuales se
interrelacionan de diversas formas todo conectado entre sí, desde la trasferencia de energía
en el sistemas hasta la asimilación de nutrientes a través de la cadena atrófica. Esta variedad
de especies vegetales y animales que se interrelacionan, resulta ser la biodiversidad presente
en un ecosistema, entre más se conoce el entorno nos permita magnificar la riqueza especifica
en cada unidad menciona.
Finalmente y en resumidas cuentas, la ecología estudia muy juiciosamente estas relaciones
entre los elementos, los seres vivos y el medioambiente, de forma tal que con amplio
conocimiento de estas interacciones entre los individuos formando poblaciones de especies,
que se asocian para formar comunidades en un ecosistema determinado, se crean las
condiciones óptimas en la gran biosfera la cual es nuestra casa que debemos mantener en
buen estado y en equilibrio. No obstante, la especie humana está rompiendo el equilibrio
natural que existe en la biosfera, debido a los excesos que ocasiona en la explotación de los
recursos del medio ambiente, principalmente por satisfacer las necesidades de una creciente
población que cada día parece estar más alejada del vínculo paternal con la naturaleza.

3. CUADRO SINÓPTICO DE LAS RELACIONES ECOLÓGICAS
INTRAESPECÍFICAS E INTERESPECÍFICAS.
¿Por qué es importante el estudio de las relaciones ecológicas para construir
pensamiento ambiental?. El estudio de las relaciones ecológicas es de vital importancia
para generar y construir pensamiento ambiental, ya que nos permite conocer la dinámica del
funcionamiento entre el medio ambiente, los elementos vitales para la vida y los seres vivos.
Lo más importante es que este conocimiento nos enseña que debe existir un equilibrio entre
dichas relaciones, el cual no debe sobre pasar ciertos límites. Existe actualmente amplio
conocimiento de las relaciones ecológicas, lo cual debe servir para crear un alto nivel de
pensamiento ambiental entre las personas, que en un buen porcentaje ya se preocupan por las
consecuencias de las actividades humanas en la tierra.

4. LOS ECOSISTEMAS O BIOMAS COMO ZONAS DE VIDA
En el ambiente encontramos muchos tipos de ecosistemas en este resumen nos enfocaremos
en los principales, cuyas denominaciones adquiere una relevancia desde mi perfil profesional
y laboral. Primero los ecosistema acuático, estos incluyen las aguas de los océanos y las
aguas continentales dulces o saladas. Estos cuerpos de agua presentan por separado
estructuras y propiedades físicas particulares con relación a la luz, la temperatura, las olas,
las corrientes y la composición química, de igual forma difieren los tipos de organizaciones
ecológicas y de distribución de los organismos. En los ecosistema marino. La oceanografía
se encarga del estudio de estos ecosistemas, pueden ser de dos tipos dependiendo de la
profundidad por la cantidad de luz solar que reciben: uno Fótico: Cuando recibe luz suficiente
para la fotosíntesis y va hasta los 200 m de profundidad. Por ejemplo, los de arrecife de coral,
las lagunas costeras etc. Dos Afótico: Donde no llega luz suficiente para la fotosíntesis. Por
ejemplo en la zona abisal y los fondos marinos. Los ecosistemas de agua dulce estos son
estudiados por la limnología se ocupa del estudio de los ecosistemas de ríos y lagos. Aquí se
agrupan los ecosistemas de agua corriente (medios lóticos) y los de agua quieta (medios
lénticos), y también las hábitats acuosos de manantiales así como los huecos de árboles e
incluso las cavidades de plantas donde se acumula agua y los ambientes de aguas
subterráneas. Los ecosistemas terrestres. En estos la flora y fauna se desarrollan en el suelo
o subsuelo, dependen de la humedad, temperatura, altitud y latitud, teniendo en cuenta que
estos ecosistemas son biológicamente los más ricos y biodiversos presentan mayor humedad,
temperatura y menor altitud y latitud. Estos se pueden clasificar según el tipo de vegetación,
siendo los bosques los de mayor diversidad, la cual va disminuyendo en los matorrales,
herbazales, hasta llegar al desierto. De acuerdo a la densidad de la vegetación que predomina
pueden ser abiertos o cerrados. Entre los principales ecosistemas terrestres tenemos: Los de
bosques o forestales los cuales forman la mayor masa de la biósfera terrestre. Los
ecosistemas arbustivos o matorrales son aquellos que tienen plantas de menor altura como
los arbustos y matas. Los ecosistemas herbáceos o herbazales, presentan predominio de
hierbas y se encuentran en sitios semiáridos. La Tundra, la conforman los musgos y
líquenes, además de hierbas y pequeños arbustos, en realidad es un ecosistema húmedo que
no presenta árboles y que presenta el subsuelo congelado. Ecosistemas desérticos o desierto
propiamente dicho: Estos poseen flora y fauna muy escasa. Se presentan en los climas

5. subtropicales principalmente, aunque también pueden encontrarse en zonas tropicales,
templadas, frías y en montaña. También tenemos los ecosistemas de paisajes modificados,
presentan intervención del hombre, por ejemplo el medio urbano y medios rurales de
explotación como los cultivos, zonas de crianza, explotación minera, zonas de tala, etc.
Ecosistemas híbridos, son ecosistemas inundable o humedales como por ejemplo los
pantanos y ciénaga, zonas húmedo terrestres presentan suelos cubiertos de agua dulce o
salada, se encuentran comúnmente en las llanuras aluviales y predominan en estas las plantas
acuáticas, herbáceas, árboles, helechos, algas y fauna adaptada a este hábitat. Ecosistemas
microbianos dentro de la microbiología igualmente podemos describir sistemas compuestos
de organismos microbianos interdependientes que comparten un mismo hábitat.

6. LAS LEYES O PRINCIPIOS RECTORES DE LA ECOLOGÍA POR BARRY
COMMONER
Sintetizando los cuatro principios o leyes de la naturaleza expuestos por el profesor Barry
Commoner concluimos 1). TODO ESTÁ RELACIONADO CON TODO LO QUE NOS
RODEA. El gran engranaje que es la biosfera funciona como un todo donde la naturaleza
esta interrelacionada de distintas formas hasta el más bajo nivel, a través de complejas
relaciones. Es decir, lo que hagamos debe afectar en cierta forma el sistema ya sea negativo
o positivamente. 2). TODO VA A DAR A ALGUNA PARTE. El resultado de nuestras
actividades humanas (las cuales en cierto modo son para garantizar nuestra súper vivencia)
tiene unas consecuencias ya que los residuos deben ir algún lugar en la biosfera o sistema
integrado, ese lugar es el ambiente del cual hacemos parte, no podemos hacer caso omiso a
los desechos que generamos, ya que algunos tardan mucho tiempo para descomponerse
naturalmente. 3). NADA ES GRATIS, TODO TIENE ALGÚN COSTO EN LA
NATURALEZA. Hasta el más mínimo movimiento que realicemos en la vida trae con sigo
un esfuerzo, toda actividad que desarrollemos en el ambiente para nuestra subsistencia
representa un costo ambiental, el cual ha sido ignorado por la gran mayoría de seres humano
en especial los que se benefician económicamente de dichas actividades. Lo que resulta en
el prejuicio ambiental para todos, a raíz de la negligente asunción de responsabilidades por
parte de los responsables y tomadores de daciones quienes no asumen dado los costos que
representan los programas de recuperación ambiental. 4). LA NATURALEZA ES MÁS
SABIA. A pesar de que el hombre cree dominar la naturaleza, estamos muy lejos de que esto
se logre y lejos de pensar que esta se destruirá con nosotros, la magnitud del deterioro
ambiental que existe y se proyecta al paso que vamos terminara por eliminar las condiciones
óptimas para que exista la vida tal y como la conocemos, llevando a la especie humana a su
propia extinción, el planeta por su parte se recupera con el paso del tiempo y quizás cree
nuevamente las condiciones para que prosperen otras especies que predominen el mundo
como sucedió con los dinosaurios, esto refleja pues la sabiduría de la naturaleza. Tenemos
que adoptar una forma más sabia de producción y de convivencia entre nosotros y la biosfera.
Que nos garantice la supervivencia de nuestra especie en armonía con nuestro entorno.

7. ¿QUÉ SON LOS BIOINDICADORES AMBIENTALES?
Definición: Se considera organismos indicadores o bioindicadores a los individuos o grupo
de individuos de una o varias especie empleados para detectar las variaciones en la calidad
de un hábitat o ambiente determinado, estos también nos permiten determinar la existencia
de concentraciones de determinados contaminantes en los sitios donde prosperan o se
ausentan, dichas especies presentan tolerancia o resistencia a algunos parámetros ambientales
y son sensibles si se presentan cambios (Vázquez et al., 2006). Por ejemplo en los océanos y
mares con la utilización de algunas especies de macro algas que a través de la bioacumulación
de hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP), nos demuestran el nivel de contaminación
de estos agentes contaminantes en un área determinada, también algunas especies de pastos
marinos son útiles como indicadores (Calva. L y Torres. R., 2008).
La aplicación de los bioindicadores depende del conocimiento general que se tenga de estos
organismos en el área de afectación, por ejemplo la variación en la carga orgánica para algún
área, por causas naturales o artificiales, ocasiona cambios ambientales en los factores físicos,
químicos o biológicos, estos cambios tienen efectos sobre la fauna presente. En oceanografía
los bioindicadores se utilizan en estudios de hidrología, transporte de sedimentos, cambios
de nivel oceánico, y hasta para la presencia de abundancia de peces. Por otra parte los
indicadores hidrológicos son organismos mediante los cuales se pueden diferenciar las
distintas masas de agua de mar (masas que difieren en sus características físicas, químicas,
de flora y fauna, y que se caracterizan, en general, por su temperatura y salinidad).
En los últimos años, se asiste a un desarrollo profuso en el ámbito de los indicadores para la
toma de decisiones, particularmente por parte de las entidades ambientales y de desarrollo
sostenible, presentándose iniciativas que comprenden escalas diversas y enfoques
metodológicos distintos. En algunos entidades el resultado de estudios que utilizan
bioindicadores como indicadores contaminantes, son tenidos en cuenta para la toma de
decisiones, como la proliferación de algas rojas (dinoflagelados) las cuales pueden ser
toxicas. Y de inmediato se debe prohibir la pesca y el consumo de agua en donde prosperen
estos organismos.

8. LA HUELLA ECOLÓGICA
La huella ecológica es un indicador de la sostenibilidad a nivel mundial que se ha ido
consolidando con el pasar de los tiempos. Así como en el contexto económico, existe desde
hace tiempo un indicador aceptado y utilizado mundialmente (el Producto Interior Bruto
PIB). Este indica el impacto ambiental que genera la demanda humana, la cual se satisface
con los recursos existentes en los ecosistemas del planeta. No obstante, frente a los nuevos
desafíos medioambientales que se presentan, es necesario completar la información del PIB
para poder establecer políticas equilibradas que reflejen nuestro compromiso con Medio
Ambiente y el bienestar social. En definición se considera la huella ecológica como el total
de superficie ecológicamente productiva necesaria para producir los recursos consumidos por
un ciudadano medio de una determinada comunidad humana, así como la necesaria para
absorber los residuos que genera, independientemente de la localización de estas superficies
(https://www.ecointeligencia.com/2011/03/que-es-la-huella-ecologica/).
¿Por qué debemos medir nuestra huella ecológica y cambiar nuestro estilo de vida por
un estilo de vida sostenible?
Nuestra huella global actual excede en casi un 30% la capacidad del Planeta para regenerarse
La deforestación la escasez de agua, la decreciente biodiversidad y el cambio climático que
resultan de ese exceso ponen en creciente riesgo el bienestar y desarrollo de todas las
naciones, si nuestras demandas al Planeta continúan a este ritmo, en el 2035 necesitaremos
el equivalente a dos planetas para mantener nuestro estilo de vida.
¿Por qué se considera fundamental para la sostenibilidad ambiental?
La huella ecológica es fundamental para la sostenibilidad del planeta para que aprendamos a
vivir en equilibrio con nuestro entorno, ya que para producir cualquier bien o servicio,
independientemente del tipo de tecnología utilizada, se necesita un flujo de materiales y de
energía, provenientes, en última instancia, de sistemas ecológicos o del flujo de energía
directa del Sol en sus diferentes manifestaciones. Lo cual produce impactos que se deben
mitigar con un buen manejo. En conclusión todos los indicadores que muestren la gravedad
del asunto son buenos, pero se hace necesario que la población los entienda, los conozca y
los aplique para que se cauce un verdadero impacto positivo en el manejo del medio
ambiente.

9. BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
KUK DZUL. J. G; DELGADO BLAS. V. H y TEJERO GÓMEZ. J. L. 2005. Poliquetos de
sustrato arenoso como bioindicadores de contaminación por materia orgánica en
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Roo Boulevard Bahía s/n esq. Ignacio Comonfort, Col. del Bosque Chetumal,
Quintana Roo, México C.P. 77019. Tel: (983)5 03 00/Fax (983) 2-96-56;
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