La educación física ayuda en la formación integral del ser humano mediante el desarrollo de la motricidad y la participación en actividades físicas que fomentan la convivencia y el disfrute. La educación física busca desarrollar competencias como la integración corporal, la expresión a través del movimiento y la solución de problemas motores. En la prehistoria y en Grecia, el ejercicio físico servía para la supervivencia y para formar hombres de acción respectivamente.