La tecnología educativa forma parte de la educación básica y general de todos los estudiantes. A diferencia de la educación técnica o formación profesional específica, la "tecnología para todos" pretende ofrecer conocimientos que incrementen el capital cultural de los estudiantes desde edades tempranas. La tecnología surge de necesidades, responde a demandas sociales e implica plantear y resolver problemas concretos de personas, empresas e instituciones.