El documento discute el derecho a la vida en Colombia y la crisis humanitaria en La Guajira, donde han muerto cientos de niños por desnutrición. A pesar de que el gobierno ha destinado fondos para mejorar las condiciones, la corrupción ha impedido que el dinero se utilice efectivamente. Además, la falta de acceso a la atención médica debido a la distancia entre los asentamientos indígenas y los hospitales ha exacerbado la situación. Un funcionario interpuso una tutela contra el estado por su abandono en el departamento.