El impresionismo se enfocó en capturar la luz y la visión subjetiva del artista sobre la realidad, generalmente mostrando escenas cotidianas. Comenzó con pinturas como Impression, soleil levant de Claude Monet y Le Déjeuner sur l'Herbe de Édouard Manet y aunque surgió en el pasado todavía influye el arte de hoy.