2. Todo comenzó en
un pueblo perdido
en las montañas.
Se trataba de un
niño con
sobrepeso y una
vida bastante
fácil.
3. Hasta que un día,
observó como su
padre, después de un
día muy duro en el
trabajo, llegó a casa y
para evadirse de la
realidad, se
emborrachó, y el acto
siguiente fue asesinar
a su mujer.
Joaquín Sorolla
4. El niño lo presenció todo, y durante su
adolescencia comenzó a guardar un
rencor oculto hacia su padre, que en
un futuro lo haría visible, y haría que
su padre pagara por el sufrimiento
causado.
5. Al pasar unos cuantos meses,
el padre llegó a casa
acompañado de una mujer. El
pequeño, ya empezando a ser
adolescente, no se lo podía
creer. Lo peor, era que su
nueva madrastra le atraía.
Era una mujer despampanante.
Tenía unos ojos que
desprendían un brillo increíble,
una cabellera morena
espectacular, y una sonrisa tan
blanca como los polvos de
talco.
6. Un buen día, o mal, según se vea, el adolescente
se cansó de su vida y antes de terminarla, quiso
escribir el destino de su padre y su madrastra, y
en ese destino escribiría la data de fallecimiento,
y no sería muy lejana.
7. Empezó con su padre.
Introdujo un cuchillo
cocinero en las
cuencas de sus ojos, y
se los iba arrancando
lentamente. La
madrastra lo
observaba, y el
adolescente dijo “Ya
puedes sentirlo como
si te pasara a ti, en
cuanto termine con él,
iré a por ti.”
8. Edgar Degas
De los ojos, pasó a la introducción de alcohol de
96º, para crear más sufrimiento. Después, con la
ayuda del cuchillo, le sacó las uñas y derramó
más alcohol.
Al acabar, asesinó a su madrastra, no tan
salvajemente, ya que ella le imponía más respeto,
pero sí después de una violación y con la misma
rabia.
9. Para finalizar con esta tragedia, el adolescente se
dirigió a la cima de una de las montañas de
alrededor. Buscó el punto más alto y se precipitó
al vació, poniendo fin a su vida.