El documento describe la historia del Señor de los Milagros en Lima, Perú. Un esclavo africano llamado Benito pintó una imagen de Cristo crucificado en una pared en la década de 1650, lo que llevó a la construcción de una ermita y una cofradía para rendirle culto. Después de un terremoto en 1655 en el que la pared se salvó, la imagen fue vista como milagrosa y atrajo devotos de todas las razas y clases sociales. Entre 1766 y 1771, el virrey Manuel Amat y Jun