El documento describe tres tipos de mentiras: el engaño, las medias verdades y las exageraciones. El engaño se ilustra con el ejemplo bíblico de Jacob engañando a su padre Isaac. Las medias verdades ocultan parte de la verdad, como la mujer de Samaria que no reveló haber tenido cinco maridos. Las exageraciones suelen contener parte de verdad pero son increíbles debido a los adornos y condimentos agregados.