El Colegio de Ingenieros de Venezuela se estableció en 1861 para apoyar al gobierno con consultas técnicas. A través de los años, se ha convertido en una institución que regula la profesión de ingeniería, vela por los intereses de los ingenieros, y asesora al estado en temas de desarrollo científico y tecnológico. El CIV también supervisa que sus miembros ejerzan sus funciones de manera ética y contribuyan al progreso del país a través de sus conocimientos y proyectos
Diagnostico del corregimiento de Junin del municipio de Barbacoas
Ensayo de Colegio de Ingenieros
1. Andreina Salazar, C.I.: 15.601.309 – Sección: SL
COLEGIO DE INGENIEROS
El Colegio de Ingenieros en este país ha sido constituido por muchos hombres
que han perdurado en la historia, debido a las grandes obras que han
planteado y ejecutado para el desarrollo evolutivo de Venezuela. Este colegio
inicio sus actividades el 28 de Octubre de 1861 y era un ente de carácter militar
dependiente del Ministerio de Guerra y Marina, donde su principal objetivo era
servir de apoyo de consultas al gobierno; veinte años después, en 1881 el
Colegio de Ingenieros pasa hacer adscrito al Ministerio de Educación,
convirtiéndose en una institución civil.
Es notorio, que muchos hombres importantes formaron parte del Colegio de
Ingenieros, cuyos nombres han transcendido por generaciones, por sus
grandes aportes que han brindado a la nación, tal es el caso de Tébar quien
fue el fundador del Ministerio de Obras Públicas y Vicente Lecuna quien fue un
celador de la ética profesional y que gracias a su aprobación de la ley de
ejercicio de la ingeniería, se crea la facultad de Colegio de Ingenieros
Venezolanos (CIV) para aplicar aranceles de honorarios profesionales y velar
por los intereses del gremio del CIV. Cabe destacar que esta facultad creada
fue traslada de un sitio a otro, hasta que en 1941 se situó en el edificio de
Parque los Caobos, esta sede fue gracias al Ministro de Obras Públicas de la
época, el Ingeniero Enrique Aguerrevere.
El CIV, es un organismo moral de carácter público que tiene derechos,
poderes, obligaciones y atribuciones que le da la Ley del Ejercicio de la
Ingeniería, Arquitectura y Profesiones Afines. Y entre muchos de sus intereses,
está el de ser guardián del interés público, asesorar al estado en los campos
competentes, aportar al desarrollo de la ciencia y tecnología, además de velar
por todos aquellos profesionales que están bajo su seno, vigilando el ejercicio
profesional de sus miembros; para que todos ellos sean íntegros en sus
funciones.
Dentro de su visión esta establecer un Colegio de Ingenieros, Arquitectos y
Afines, formado sobre la base de un espacio válido para el desarrollo y
crecimiento integral de sus profesionales, donde le prevalezca el espíritu de
solidaridad, respeto a los agremiados y a la nación venezolana, con valentía
moral en lo institucional, democrático y participativo. Y el CIV, enmarca dentro
de sus parámetros el no desarrollar actividades de carácter político, partidista o
religioso, es decir, es un organismo imparcial donde garantiza a sus miembros
custodiar sus intereses sin distinción de ideales.
A través del CIV se crearon diversas fundaciones y sociedades sin fines de
lucro, donde cada una dependiendo de su rol agrupan miembros de su área
para aportar su granito de arena en el crecimiento de nuevos profesionales,
2. elaboración de proyectos que favorezcan el desarrollo de la ciencia y la
tecnología. Dentro de esas fundaciones y sociedades se pueden nombrar: La
Sociedad Venezolana de Ingenieros Forestales, El Fondo de Previsión Social,
Sociedad Venezolana de Ingenieros Civiles, Sociedad Venezolana de
Ingenieros de Petróleo y Sociedad de Ingeniería de Tasación de Venezuela y
La Fundación Instituto de Mejoramiento Profesional.
Todo agremiado del Colegio de Ingenieros, Arquitecto y Afines, debe ser un
profesional con ética y deontología profesional, que aplique sus funciones
íntegramente al margen de la ley, respetando los estatutos que indican en el
CIV y de cualquier otra sociedad y/o fundación a la que pertenezca. Ayudando
con su profesión por medio de sus conocimientos para seguir progresando en
este maravilloso país. Por ende, cada Ingeniero, Arquitecto o Afines debe
inscribirse en tan magna organización. Además, cada futuro profesional de
Ingeniería, Arquitectura o de carreras afines, debe fomentar su ética
profesional, para garantizarle a la Nación, a la sociedad y así mismo, un gran
profesional, que al momento de ejercer sean indispensables sus conocimientos
y la forma como lo ejecuta y lo transmite.
Es importante que en la República Bolivariana de Venezuela se cuente hoy en
día con el Colegio de Ingenieros Venezolanos, para que por medio de su
agrupación de agremiados brinden aportes a la ciencia y a la tecnología, vigilen
minuciosamente la Ley de Ejercicio de la Ingeniería y custodien los intereses
de los miembros del CIV, entre otros. Por lo tanto, la Nación y sus miembros,
principalmente sus directores, deben garantizar que la misión, visión y objetivos
de la CIV, siempre se cumplan, y que se supervisen sus reglas y renueven los
proyectos constantemente para ir a la par con los cambios constantes de las
áreas competentes.
En conclusión, Dios mediante los miembros actuales del CIV y los futuros
integrantes de esta organización, sigan realizando sus aportes a favor del
progreso de este país, recuperando a Venezuela que está en pedazos, sacarla
de la miseria y el egoísmo, y beneficiar a todos los ciudadanos por iguales (sin
distinción de ideales políticos, económicos, culturales, etc.). Este puede ser un
sueño, pero se sabe que si se puede, porque si nuestros antepasados pudieron
nosotros también podremos; y los antecesores dejaron como ejemplo de que si
se puede: las autopistas, viaductos, obras hidráulicas, edificaciones y grandes
complejos industriales, entre otros.