La erección del pene ocurre cuando aumenta el flujo sanguíneo hacia el pene, expandiendo los espacios lacunares y comprimiendo las venas circunflejas para limitar la salida de sangre y mantener la erección. La eyaculación implica la secreción de fluidos seminales de las glándulas accesorias a la uretra prostática, seguida de contracciones rítmicas uretrales y perineales que eyectan el semen a través del meato uretral.