La ardilla más pequeña de una familia se aventuró por el bosque y conoció a una marmota y un castor con los que jugó y se divirtió. Los tres animales jugaron a las escondidas, se montaron sobre la marmota y nadaron con el castor haciendo de nave. Antes de que anocheciera, la ardilla se despidió de sus nuevos amigos y regresó contenta a su madriguera.