El documento describe la caída del Imperio Romano en Hispania y las invasiones de los pueblos germánicos como los vándalos, alanos y suevos. Los visigodos fueron llamados por los romanos para expulsar a otros bárbaros y eventualmente se establecieron en Hispania, aunque el Imperio Bizantino trató de recuperar el sureste. Los visigodos se impusieron a los hispanorromanos aunque su nobleza se fusionó con la romana. Más adelante, los conflictos internos debilitaron