La fluoroscopia es un tipo de radiografía que permite ver en tiempo real los órganos, tejidos y estructuras internas en movimiento, utilizando radiación continua y un medio de contraste. Se usa para estudiar el tracto gastrointestinal y las vías urinarias, y aunque el tiempo de exposición es mayor que en una radiografía normal, el estudio se realiza en menos de 5 minutos excepto el ERCP que puede durar hasta 50 minutos. Requiere preparación del paciente y protección adecuada durante la prueba.