La seguridad social es un derecho humano que busca proteger a las personas ante contingencias que puedan afectar sus ingresos económicos. El Estado tiene un rol en garantizar el acceso de todos los habitantes a prestaciones básicas de seguridad social, ya sea a través de instituciones públicas o privadas. El trabajo social promueve sistemas de protección social inclusivos que traten a todas las personas con dignidad y respeto, garantizando sus derechos humanos.