El GPS permite determinar la posición de un objeto en cualquier parte del mundo con alta precisión utilizando satélites. Se usa comúnmente para la navegación en automóviles, barcos y deportes al aire libre, así como para el rastreo de vehículos y la topografía. Funciona mediante la recepción de señales de tiempo de satélites GPS, y su desarrollo comenzó en la década de 1960 impulsado por agencias estadounidenses para fines militares y civiles.