El documento discute la responsabilidad de los guionistas en la televisión y los valores que debe promover. Argumenta que los guionistas deben fomentar valores morales y que la televisión debe servir a la comunidad en lugar de ser solo un negocio. También enfatiza la importancia de leer, escuchar y sentir para escribir guiones de calidad así como los desafíos de prepararse para una carrera en la industria televisiva.