Las herramientas básicas para comunicar no son las mismas que ayer, ni tampoco serán las mismas que mañana. La inmediatez promueve fórmulas de comunicación instantáneas asociadas al estímulo y la rápida respuesta, que prácticamente atienden a impresiones, sin apenas haber procesado el mensaje. Quien llega el primero, parece ser hoy el que comunica mejor, pero existen herramientas más sostenidas en el tiempo, que pueden adaptarse mejor a los cambios en los contextos sociales y económicos. La calidad con la que se ofrezcan llevará a que ocupen los puestos de primera.