El documento describe el movimiento artístico del Fauvismo que surgió en París en 1905. Se caracterizaba por el uso de colores intensos y arbitrarios. El crítico Louis Vauxcelles acuñó el término "fauves" para describir despectivamente las obras de Matisse, Derain y Vlaminck expuestas en el Salón de Otoño de ese año. Aunque el grupo se disolvió rápidamente, Matisse permaneció fiel a este estilo colorista durante toda su carrera.