El sistema muscular puede verse afectado por diversas alteraciones, como lesiones, enfermedades inflamatorias, degenerativas, metabólicas o neuromusculares. Estas afecciones pueden producir dolor, debilidad, rigidez o parálisis, y requerir tratamientos como fisioterapia, medicamentos o cirugía para aliviar los síntomas y mejorar la función muscular.