La salud se define como un estado de completo bienestar físico, mental y social, según la OMS. Se distinguen tres tipos de salud: física, la ausencia de enfermedad; mental, la ausencia de desequilibrios o enfermedades mentales; e integral, que incluye factores como la vida social y el derecho a la educación y vivienda. La salud de los adolescentes depende de cómo afronten los cambios biológicos, psicológicos y emocionales que experimentan durante esta etapa.