2. LECCIÓN No. 4
ESCUELA POSITIVA DEL DELITO
LOMBROSO Y LA CONCEPCIÓN
ANTROPOLÓGICA DEL DELITO
3.
4. I. ANTECEDENTES.
Cesar Lombroso (1836 - 1909), médico italiano, es no sólo el creador de la Antropología
Criminal, sino el fundador de la Criminología, por eso se señala como la fecha del
nacimiento de ésta ciencia, aquella en que apareció a la luz la primera obra de este autor: "El
hombre delincuente", año 1876, Sin embargo tal hecho no significa que Lombroso sea
considerado como el primero en ocuparse de la materia, pues antes que él hubieron muchos
que, desde tiempos remotos, se preocuparon de averiguar el por qué del delito e inclusive de
realizar estudios sobre Antropología. Hemos mencionado, en la lección anterior, a sus
precursores próximos: Despines, Lauverse que investigaron la sociología del delincuente
habitual y los tiempos y cráneos de criminales; el belga Morel que edificó la teoría de la
Regeneración; los ingleses Nicholson y Thomson, el tipo somático y la índole síquica del
delincuente habitual; Virchow, Broca y David que efectuaron estudios sobre Antropología y
Antropometría. Todos estos y otros mas establecieron las bases de nuestra ciencia,
especialmente en lo que se refiere a la concepción antropológica del delito, pero Lombroso
es el fundador de esta teoría porque sobre estos cimientos levantó el edificio de la
Antropología, marcando la génesis de la Criminología.
5. " EL HOMBRE DELINCUENTE ( LE HOMO
DELINQUENTE)".
La publicación de éste libro causó revuelo general, tanto en el
mundo científico como en el profano, por contener una serie de
consideraciones que chocaban contra ideas arraigadas y por la
profusión de novedosas experiencias que despertaron toda suerte
de susceptibilidades y dudas.
6. Entre los entendidos de la materia se desató polémicas profundas
que duran hasta nuestros días y entre los demás lectores comentarios
positivos y negativos. Es que el libro contiene cosas como estas: El
instinto criminal parece manifestarse desde las plantas, hay especies
carnívoras, como las sarracenaceas, las droseráceas, las nepentáceas,
las utricularís que se nutren de insectos y de pequeñas aves y con
este fin atrapan sus víctimas atrayéndolas con el olor excitante que
emiten sus hojas y una vez que las tienen posadas en el punto
preciso las asfixian encorvando sus pétalos o cépalos o clavándoles
una espina. Otras veces ni siquiera se alimentan de ellas, las matan
simplemente por el "gusto de matarlas". En todo proceso advierte el
autor, hay una manifestación de astucia y alevosía. Es más,
discernimiento y voluntad de acción (libre arbitrio), porque
rechazan, por ejemplo a los animales muy pequeños.
7. Después de esta primera disertación acerca de la flora delictiva, pasa a
los equivalentes delictivos en la escala zoológica. Los animales desde
luego con rasgos y predisposiciones criminales mas acentuados que las
plantas, matan por alimentos, por la posesión de la hembra, por el mando
del rebaño, por "venganza" o simplemente por efecto de un ataque de furia
o por el hábito de matar. Roban con habilidad casi humana y lo hacen
contra su costumbre cuando es por efecto del alcohol (suministrando
exprofesamente por el hombre o buscado por aquel en ciertas plantas que
contienen alcaloides con dosis alcohólicas). Luego los actos contra natura
(relaciones sexuales entre animales de distintas especies) y los
sodomíticos (relaciones entre machos).
8. Este controvertido libro "El hombre
Delincuente" sufrió en sus posteriores ediciones
una serie de modificaciones y adiciones hasta
que en 1897, con la quinta edición, salió el texto
definitivo que consta de tres volúmenes y un
atlas.
9. II. LA TEORÍAANTROPOLÓGICA DE LOMBROSO.
A. Los primeros estudios realizados por Lombroso.
Cuando Lombroso desempeñaba las funciones de médico
militar, en Italia, allá por los años sesenta del siglo pasado, notó
deficiencias anatómicas entre los reclutas más indisciplinados.
Mas tarde cuando le tocó estudiar el cadáver de un famoso
bandolero de apellido Vilella, descubrió, entre otras
deformaciones somáticas, la existencia de faceta occipital
media que poseen los simios y muchos hombres primitivos, y
que en el hombre moderno rara vez se presenta.
En este descubrimiento se apoya
fundamentalmente la teoría del atavismo criminal.
En sus estudios posteriores, Lombroso halló mayor
cantidad de anormalidades a las que más tarde fue
atribuyendo las causas del delito.
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11. B. La explicación de la Criminalidad.
La Criminalidad se explica según Lombroso,
principalmente, por medio del atavismo, esto es,
la tendencia hereditaria a reproducir los
caracteres de antepasados remotos. Las
investigaciones realizadas en delincuentes vivos
o en muertos mediante las autopsias permiten
llegar a la conclusión de que los autores de
delitos graves, así como los multireincidentes e
incorregibles, poseen muchos de los rasgos
propios del hombre primitivo y del salvaje
actual, no sólo los caracteres anatómicos, sino
también los fisiológicos y síquicos.
12.
13. Avanzando sus investigaciones, el mismo Lombroso se dio cuenta
de que la teoría atávica pura no permitía explicar todos los casos por
ser muy rígida, pues encontró muchos criminales violentos que sin
embargo no tenían deformaciones anatómicas: pero la mayoría eran
epilépticos. Incluyó, entonces, este nuevo hallazgo entre las causas
naturales de la criminalidad.
Es verdad que el epiléptico en algunas aspectos se asemeja al
atávico, incluso se comporta como un salvaje. No solo tomó en cuenta
esa epilepsia que se manifiesta mediante convulsiones “epilepsia
genuina”, sino la otra que carece de ellas, llamada epilepsia larvada,
que se reconoce por los accesos de furia, amnesia, vértigos, etc. Esta
enfermedad en sus dos aspectos, viene a ser una degeneración del tipo
humano, como el estudiado muchos años atrás por el Belga Morel, y la
degeneración se equipara con el atavismo.
14. Poco más tarde Lombroso descubrió la locura moral
caracterizada por la falta absoluta de sentido moral. El loco
moral sin ser atávico, epileptico, sin deformaciones
anatómicas ni alteraciones mentales, no obstante es capaz de
cometer los mas terribles crímenes, con la mayor crueldad y
sadismo. Vio por conveniente incluir otra causa mas de la
criminalidad natural porque encontró que el loco moral se
asemeja al epiléptico en su falta de sentimiento.
De esta manera la Teoría Lombrosiana resulta
sustentada por tres bases: el atavismo, la
epilepsia y la locura moral.
15. III. EL TIPO LOMBROSIANO O CRIMINAL NATO.
Con mucha paciencia y enorme acopio de datos,
Lombroso terminó de edificar la Antropología Criminal,
que quiere decir que el hombre, como individuo, proviene
las principales causas del crimen. El principal tipo de
criminal, dentro de esta concepción es el
LOMBROSIANO CRIMINAL NATO (o criminal natural
que es lo mismo). También se llama el delincuente
verdadero ("homo delinques"); una peculiar especie
humana ("especie generis humams"), fácilmente conocible
en virtud de determinadas características corporales y
anímicas, como las que se describen a continuación:
16. A. Caracteres Anatómicos.
El criminal natural o nato: 1) menor capacidad craneana que el
hombre honrado; 2) existencia de faceta occipital media, 3) aplanamiento
del hueso occipital; 4) asimetría cráneo-facial; 5) arcos superciliares
prominentes; 6) maxilar inferior muy desarrollado; 7) enorme capacidad
orbital; 8) frente huidiza y estrecha; 9) grandes senos frontales; 10)
estrabismo; 11) escasa pilosidad secundaria; 12) irregularidades en las
muelas del juicio.
A las críticas de sus adversarios en sentido de que los caracteres
anteriormente descritos no son exclusivos de los criminales, pues también
se hallan en las personas honradas. Lombroso respondió afirmando que
las tendencias criminales no pueden de la existencia de uno solo de los
caracteres, sino de su acumulación en una misma persona, lo mismo con
relación a los caracteres fisiológicos, síquicos y sociales.
17.
18. B. Caracteres Fisiológicos.
1) Una agilidad mayor a la común; 2) mayor sensibilidad en los
estímulos meteorológicos y magnéticos; pero también mayor cantidad
de defectos auditivos y visuales, así como el mal funcionamiento del
vaso-motor 3) la anestesia y la analgesia, insensibilidad al dolor propio
y ajeno, por lo que se explica la falta de piedad y compasión con la
víctima; 4) el mancinismo o zurdez, que extraña un anormal
organización y funcionamiento del derecho.
C. Caracteres síquicos.
1) Insensibilidad moral y afectiva; 2) pereza, 3) crueldad; 4)
tendencia a la venganza; 5) Inclinación a la ebriedad y al juego: 6)
ausencia de remordimiento; 7) ferocidad; 8) imprevisión.
19. D. Caracteres Sociales.
1) Posee un argot o jerga propios (lenguaje de mal
gusto y poco comprensible), que proviene de profundas
raíces atávicas; 2) el tatuaje que revela gran obtuosidad
ante el dolor físico y sus temas manifiestan odios y
obscenidades, 3) tendencia a la asociación; 4) tendencia al
vagabundaje (otro resabio del atavismo).
20. IV. CLASIFICACIÓN DE LOS CRIMINALES.
Lombroso nunca pretendió explicar los delitos con
una sola causa ni reducir a los criminales a un tipo
único; siempre admitió la variedad de los delitos y de
causas, sin embargo en un principio su clasificación
fue muy subordinada a la concepción antropológica,
pero mas tarde después de tantas discusiones fue
haciéndose mas amplia y comprensiva, sobre todo
bajo la influencia de Ferri, finalmente ya en la última
edición de su libro presenta una clasificación muy
aceptable, que es la que se ofrece a continuación:
21. A. El criminal nato.
Es el que delinque impulsado por su propia naturaleza, a él
le corresponden los caracteres anatómicos, fisiológicos, síquicos
y sociales detallados en el capitulo anterior. Se incluye dentro de
este grupo a los criminales, locos morales y a los epilépticos,
pese a que presentan caracteres diferenciables con los criminales
atávicos, a quienes consideran como los prototipos de la
delincuencia nata.
Las características de este grupo es la irresistible tendencia
al delito. Se trata de individuos que según esta teoría nacen
"predestinados" al delito, no predispuestos, que eso sería
aceptable, porque da esperanzas de que no resulte lo que parece
suceder, en cambio la predestinación no da opción ni posibilidad
de que sea de otra manera sino como esta marcado su suerte.
22. Una especie de fatalismo chocante, que de admitirse
conduciría a la aberración de tener que encerrar en la cárcel a un
"predestinado" criminal aun antes de cometer un delito, en
previsión de que tarde o temprano lo ha de hacer, situación que
resulta intolerable sobre todo para los juristas, en razón de que
los textos legales, no solo los de corte clásico, sino todos en
general definen el delito como la infracción de la ley penal.
En cuanto al porcentaje que representan en la criminalidad
total o en las distintas clases de delitos, Lombroso afirma que los
criminales natos constituyen el 23 por ciento del total, con la
siguiente distribución: asesinos 36%; ladrones 25%, bigamos y
estafadores 6%.
23. B. Criminal Pasional o de ímpetu
El delincuente pasional representa lo contrario del criminal nato;
posee un cráneo en el cual no existe anomalía: rostro bello y alma
honesta. Sus delitos son cometidos por causas proporcionadas al
afecto y nobles en su fondo, tales como el amor, el sentido del honor,
del deber, del patriotismo. Después de llevar a cabo el delito se
arrepiente de él, salvo en los casos en que se hallan convicciones. Es
corriente de que no tomen medidas de precaución y que usen arma
mal escogida, salvo en algunos casos de atentados políticos.
Los delitos más frecuentes entre los pasionales son los de
homicidio, heridas, infanticidio, duelos y delitos políticos.
En cuanto a la cantidad, los pasionales son una pequeña minoría
dentro de la criminalidad total; entre el 5 y el 6%.
24. C. Criminales locos.
En este grupo se hallan comprendidos los maniáticos y
melancólicos, los dementes, las personalidades delirantes, los
idiotas, imbéciles, etc.
A veces la locura no es causa de que se termine en la cárcel, sino
una consecuencia del género de vida que se lleva en la misma. En
cuanto a los rasgos generales, los hay unos que no tienen
deformación anatómica ni funcional, otros, en cambio, tienen
algunos caracteres más exagerados que el tipo del criminal nato. Los
estímulos delictivos suelen ser absurdamente desproporcionados en
relación con la reacción provocada, a veces son puramente
imaginarios. También entre los criminales locos se observa en algún
grado el arrepentimiento. La proporción de los delincuentes locos es
de 5 al 15%.
25. D. Delincuentes ocasionales.
Este grupo comprende a quienes delinquen
debido fundamentalmente a las influencias"
ambientales; entre ellos están los delincuentes
puramente ocasionales (seudo criminales), que
no poseen caracteres antropológicos criminales.
También integran este grupo los autores de
delito involuntarios (culposos) o que no
entrañan perversidad personal; aquellos que se
dejan vencer por costumbres o tradiciones o se
ven impulsados por causas externas de
extraordinaria gravedad como la extrema
necesidad.
26. V. CONCLUSIONES.
Hemos adelantado líneas arriba, que un punto muy vulnerable de
la concepción antropológica y que han merecido acerbas críticas es la
"Predestinación" del criminal nato, inexorablemente arrastrado al
delito. Luego con respecto a la amoralidad de los primitivos o
salvajes, parece, por lo que nos demuestra la teoría evolucionista, que
la apreciación de Lombroso fue un tanto caprichosa y simple.
También se lo critica a este autor por el uso exclusivo de los
métodos de las ciencias naturales, las que por si solas son
inadecuadas para llegar a conclusiones verdaderas. Por último, se
dice que Lombroso vio solo el lado natural del delito, sin considerar
el aspecto cultural, lo que motivo la unilateralidad de sus
apreciaciones.
27. Con todo, los méritos de Lombroso son muy superiores a
las censuras. El es el que puso en claro la consideración causal
explicativa del delito, haciendo mas flexibles las normas
jurídicas, centralizó la atención en torno a delincuentes
haciendo que la profilaxis y terapéutica del delito tuviese su
apoyo en el conocimiento de las causas del mismo.
Los mas serios críticos que tuvo Lombroso en su época
fueron: Gobelli, Orano, Monti y Tarde, con quienes sostuvo
duras polémicas.
Lombroso es considerado, con justa razón, como el creador de
la Criminología.