1. El deshielo. Apuntes del paraíso
Este libro se inserta en la tradición
del ensayo latinoamericano y le
añade una nueva perspectiva a dicho
género al inscribirse en un territorio
dual que aborda la relación –muchas
veces conflictiva– entre México y su
vecino del norte, la cual queda
expresada por medio de una
profunda meditación realizada desde
diversos ángulos. El deshielo es una
suerte de polifonía emitida desde
la actualidad, a partir de una
mirada sobre dos ciudades
emblemáticas: Nueva York y la
Ciudad de México y sus respectivos
habitantes, que nos acerca a dos
mundos radicalmente diferentes que
ocupan un solo continente. Es
igualmente una reflexión personal y
colectiva que nos introduce en una
galería de espejos que reflejan y son
reflejados al mismo tiempo que no
obstante su carácter caleidoscópico,
permite aprehender con precisión la
realidad presente de este mundo
americano que se expresa tanto en
inglés como en español.
–Michael Schuessler
2. La delegación Iztacalco publicó el
libro En la casa de la sal.
Monografía, crónicas y leyendas de
Iztacalco, obra de Nayar Rivera
bellamente editada por Centro
Editorial Versal […] en la que se
describe lo que fue hasta los 50 una
comunidad rural, con sus chinampas
y su intenso comercio de verduras y
flores. En el actual territorio de la
delegación estuvo una de las
célebres escuelas de pintura al aire
libre, precisamente en Santa Anita, lo
que le mereció a esta localidad el
título de Barbizon mexicano, por la
población cercana a París donde se
establecieron los impresionistas
franceses.
–Humberto Musacchio
3. Reglas de urbanidad despliega
poemas de rara elegancia, de
acendrada limpidez en su dicción y
en dibujo, que son al mismo tiempo
cantos de furia y de entraña.
Una apuesta radical por los
poderes de la metáfora, por el
magnetismo de las atmósferas y
por la plenitud estética del
lenguaje se alían en Reglas de
urbanidad a una experiencia
apasionada del frágil mundo real y del
agudo instante vivido. Nayar Rivera
los vive y los contempla desde su
reflejo -al mismo tiempo asombrado y
escéptico- en un más allá de la
realidad y del instante.
–José Joaquín Blanco
4. México se escribe con J es un libro
colectivo como la bandera del arco
iris que sus amigos colocaron sobre
el ataúd de Monsiváis, a la vista de
todos, para celebrar y documentar las
muchas aportaciones a la cultura
nacional de artistas, escritores,
dramaturgos gays. Esta bandera
sobre el ataúd también fue un reflejo
de cómo experimentan su realidad, a
veces cruel por las vejaciones que
tienen que soportar, pero que han
logrado, en muchos casos superar,
como hizo Salvador Novo, quien
presumió de una homosexualidad tan
ostentosa como la de Oscar Wilde.
[…]México se escribe con J es
histórico porque es el primer libro
colectivo que documenta y celebra la
manera particular en que los gays de
México representaron su mundo por
medio de cuadros, poemas, obras de
teatro, fotografías, crónicas, cine y
televisión.
—Elena Poniatowska