2. “Al enfrentarnos con la
problemática de los peligros
que como adolescentes
enfrentamos a diario y cómo
prevenirlos, hemos decidido
abordar dicho tópico desde
diversas áreas: comenzaremos
tratando de esbozar las
causas por las cuales los
adolescentes nos comportamos
de la manera en que lo
hacemos y, luego, iremos
desembocando en diferentes
problemáticas que se
desprenden de la inicial.”
4. *Exploramos constantemente nuestro mundo
circundante y descubrimos, por ejemplo:
• Sensaciones nuevas
• Escenarios nuevos, de riesgo
• Nuevas formas de relacionarnos con el otro y
nuestro entorno.
5. *Conocemos la vida, en suma, a través del peligro…
¿siempre fue así?:
• Antiguamente, mediante ceremonias de iniciación se
exponía a los jóvenes de manera simbólica,
organizada, estructurada, codificada, a futuros
peligros en un ambiente seguro. A su vez, estos
jóvenes encontraban dicha sensación de resguardo en
las figuras parentales, situación que no se da
siempre en nuestros días.
6. Nuestra sociedad
*¿Y qué hay de nuestra sociedad? La misma es una sociedad consumista, la sociedad
de las soluciones rápidas y fáciles: resulta que el alcohol y las drogas ofrecen una
respuesta instantánea a problemáticas como la timidez o la intolerancia a la
frustración.
*En suma, hay una falta de sentido común general: todos sabemos que encender una
bengala dentro de un boliche pone en riesgo nuestras vidas, al igual que el hecho de
incendiar un sillón puede provocar un serio incendio. De modo que carecemos de
sentido común tanto jóvenes como adultos.
*Por ende, los adolescentes, en nuestro descontrol, buscamos incansablemente límites
puesto que la imposibilidad de representarnos los mismos es angustiante. Ahora bien,
son los padres quienes deben formar aquel cerco imponiendo límites y dando espacio
para el diálogo con sus hijos. Estamos, finalmente, frente a una problemática que
trae aparejada otra: la crisis parental.
8. * Si bien no todos los padres son iguales muchos piensan o actúan de
forma similar frente al peligro que ellos mismos aceptan que sus hijos
sufren.
* La fundación Proyecto Padres pidió hacer una investigación para
conocer el diagnóstico sobre los hábitos y cómo actúan frente al
contexto que viven sus hijos actualmente:
– el 86% preocupación por la inseguridad en la calle y las adicciones.
– el 82% demostró su preocupación por los accidentes de autos.
– el 75% preocupación por los contenidos que sus hijos consumen en
los medios de comunicación
– el 66% preocupación por los viajes de egresados.
9. * Los padres están de acuerdo en que pueden generar cambios en relación al desarrollo
o al esparcimiento de sus hijos, pero al mismo tiempo, reconocen que no hacen nada
y, sostienen que quien debería hacer algo es el Estado
* El problema, a su vez, es que muchos padres se movilizan cuando ya ha ocurrido una
tragedia o cuando ya ha habido un suceso peligroso para la vida de sus hijos, cuando
aparecen la bronca, la desgracia y la culpa. De modo que no se trata de que los
padres no se “ocupan” de sus hijos, sino que no saben cómo pararse frente a la
realidad adolescente.
11. * Según la Lic. Gabriela Renault de Domínguez, “este riesgo que atraviesan los fines de
semana muchos adolescentes tiene que ver con a la crisis que atraviesan los adultos
en el siglo XXI”. “En la clase media y alta los adultos se rompen para que (a sus
hijos) no les falta nada y para que puedan ir a los mejores colegios y en la clase baja
salen a cirujear. Hoy los chicos están en la soledad. Sus padres le dedican poco
tiempo y hay poca escucha, poca bajada de valores, hoy no están esas pautas”, opinó
Renault.
* El psicoanalista Enrique Novelli sostiene “Lo que deben hacer los padres es hablar
mucho y mostrarles a los hijos cuales son los lugares de peligro, las situaciones
complicadas. El problema es que como las generaciones cambian cada vez con mayor
velocidad, a veces los padres se sienten muy lejos de sus hijos, por eso es que deben
conversar mucho, para aggiornarse y tratar de comprenderlos. Los padres deben ser
capaces de poner límites firmes y claros, pero no autoritarios”.
12. “Las leyes que existen en
nuestro país…”
No solamente los padres son los que ayudan a
proteger a sus hijos, sino que el Estado
también debería ayudar a proteger a sus
jóvenes, leyes y decretos mediante. Veamos
qué sucede desde la perspectiva
gubernamental.
13. * Desde el gobierno, se han aprobado leyes como la “Ley antitabaco”, la
cual ha sido muy exitosa, generando que ya casi no se encuentren
personas fumando en espacios públicos y que, a su vez, los adolescentes
consuman menos tabaco.
* Asimismo, se han llevado a cabo numerosos proyectos y campañas para
establecer la disminución de los niveles de violencia en los boliches
bailables, como la campaña “Tu aporte vale”, en donde se ha
remarcado la importancia de la participación ciudadana responsable.
* Se aprobó la apertura de una comisión investigadora (a partir de la
tragedia de República Cromañón en Diciembre del 2004) para
establecer responsabilidades institucionales en boliches bailables y
bares.
15. * En diciembre de 2004, la Cámara que agrupa a locales bailables porteños daba
cuenta de más de 200 boliches, mientras que un año más tarde se encuentran
contabilizados 67 en actividad.
* En los tres meses de “noche seca” (luego de Cromañón se cerraron los boliches hasta
su regularización), existían los pubs en donde la gente iba a bailar, que, por
supuesto gracias a inspecciones fueron cerrados. Algunos ejemplos: Baires Resto Bar,
Solar Guaraní, entre otros.
* En un artículo de un diario de Corrientes publicado el 24 de junio de 2005,
mencionan el ejemplo de “Ágata Bar” que fue clausurado por repetidas
irregularidades.
* El gobierno porteño introdujo cambios al Código de Faltas. Las multas van desde los
$100 a los $10.000.
* Durante 2005, se impusieron 418 clausuras a 356 locales que no tenían la
habilitación correcta.
17. *Los motivos por los cuales se han profundizado las
inspecciones y las sanciones en boliches bailables son:
-Por motivos de seguridad, ya que muy pocos locales contaban con un
plano que indicara las salidas de emergencias y tener matafuegos.
-Por venta de alcohol a menores, en donde hoy en día existen leyes que
hacen penalizar a quienes no la cumplan. Recordemos que han
existido casos de jóvenes que han caído en un coma alcohólico y
muchos han perdido la vida por tomar en exceso en los boliches.
-Por capacidad limitada en los boliches en donde no pueden entrar más
de lo indicado.
-Por los materiales y la construcción del local, ya que deben haber
materiales ignífugos.
18. Violencia y alcohol
• Asoma un nuevo problema juvenil, la violencia sin motivos aparentes, casi
incomprensible, incentivada por el consumo de alcohol, bebidas energizantes y drogas,
y alentado por un esquema de diversión que parece concebido para que el descontrol
no tenga responsables.
• El consumo de alcohol crece entre los adolescentes argentinos. Y mata. Las
estadísticas son estremecedoras. Cada vez se presentan más casos de coma alcohólico
en los hospitales porteños. Los más jóvenes tienen un nuevo ritual: reunirse en
prematinés sólo para beber
• quot;Cerca de un 80 por ciento de los jóvenes de entre 16 y 18 años resuelve sus
conflictos a las trompadas. Muchos terminan con lesiones, y en algunos casos hasta
con denuncias policiales. En la última década, la citación de padres a los colegios por
enfrentamientos físicos de sus hijos aumentó un 60 por cientoquot;
20. • Como adolescentes creemos que esta problemática
debe ser abordada desde los múltiples factores que
inciden en la misma. De modo que, al analizar las
causas del descontrol adolescente, debemos
preguntarnos qué sucede en los hogares de cada uno
de nosotros, cuál es la postura que los padres toman
frente a estos hechos y, finalmente, de qué modo
nuestro Estado procura la protección de sus jóvenes.
21. • A su vez, vemos como herramienta de mucha utilidad para sanear
esta situación la presencia de los padres: como referentes, deben ser
quienes nos guíen, quienes nos contengan y nos ayuden a convertirnos
en mejores personas. No obstante, creemos firmemente que el paso
principal para revertir esta situación es el fomento de la
responsabilidad: solamente siendo jóvenes responsables podremos
reclamar que se respeten las leyes y decretos que regulan los boliches;
solo siendo responsables podremos evitar tragedias como las de
República Cromañón o Kheyvis; siendo responsables estaremos en
condiciones de responder por nuestros actos. En conclusión, la llave
para la resolución de esta problemática es la educación para la
libertad.