Los valores éticos y morales, así como la religión, son componentes importantes para la salud mental y pueden ayudar a superar trastornos de conducta al brindar formas válidas y convincentes de afrontar las dificultades de la vida. Los profesionales deben vivir estos valores como un modelo para los pacientes, quienes no necesitan ser juzgados sino encontrar guías que les convenzan sin forzarlos a encajar en sistemas que no se adapten a sus limitaciones.
Cuadro Comparativo acerca de la ética, la moral, y los valores
este trabajo esta hecho con fines educativos, para el Instituto Tecnológico Antonio Jose de Sucre
En una sociedad que presenta una perdida de principios y valores, la ética y la moral adquieren una gran importancia reorientando la actividad profesional que en la mayoria de los caso solo ve el beneficio economico ante todo. Es momento de reflexionar acerca del componente ético como elemento fundamental para alcanzar un éxito duradero.
Cuadro Comparativo acerca de la ética, la moral, y los valores
este trabajo esta hecho con fines educativos, para el Instituto Tecnológico Antonio Jose de Sucre
En una sociedad que presenta una perdida de principios y valores, la ética y la moral adquieren una gran importancia reorientando la actividad profesional que en la mayoria de los caso solo ve el beneficio economico ante todo. Es momento de reflexionar acerca del componente ético como elemento fundamental para alcanzar un éxito duradero.
Valores humanos y principios bioéticos en los profesionales del área de la sa...AliciaRamirez97
Se presenta un breve análisis de la importancia de los valores humanos y los principios bioéticos en la práctica laboral de los profesionales del área de la salud.
La intervención psicológica en el Trastorno por déficit de atención e Hiperactividad (TDAH) es una terapia para ayudar a los niños y adolescentes a desarrollar sus capacidades cognitivas
1. VALORES
Las principios morales y religiosas
de la salud
Se considera que los valores éticos y morales son un componente muy
importante en la salud mental y en la desaparición de los trastornos de
conducta dado que brinda a la persona formas válidas y convincentes de
afrontar aquello que le ha tocado vivir o, bien, que vive, por sus propias
decisiones anteriores, y, en este sentido, una pieza clave la vivencia de
dichos valores por parte del profesional. La persona con trastornos del
comportamiento no necesita recriminaciones sino que necesita,
fundamentalmente, modelos válidos, que le convenzan y no domesticar su
conducta en un sistema, en el que él quizá no encaje por sus propias
limitaciones personales, o bien que no le convenza.