El documento resume la doctrina católica de la Inmaculada Concepción de María, definida como dogma en 1854. Explica que María fue preservada de toda mancha de pecado original desde el primer instante de su concepción, como un privilegio singular concedido por Dios. También describe cómo esta verdad fue progresivamente aceptada en la Iglesia a lo largo de los siglos, hasta ser declarada formalmente como revelada por Dios.