El documento define un material peligroso como cualquier sustancia sólida, líquida o gaseosa que puede causar daños a las personas, el medio ambiente o la propiedad debido a sus características físicas, químicas o biológicas. Explica que para manejar materiales peligrosos se requiere el reconocimiento, la evaluación, el control y la información sobre la sustancia, así como medidas de seguridad para proteger a las personas y los recursos involucrados.