Este documento describe tres tipos de mantenimiento: mantenimiento planificado, mantenimiento reactivo y mantenimiento predictivo. El mantenimiento planificado se realiza bajo condiciones controladas antes de que ocurra una falla. El mantenimiento reactivo ocurre luego de una falla. El mantenimiento predictivo detecta fallas incipientes usando técnicas como termografía para evitar paros de emergencia.