El mantenimiento preventivo es un proceso programado que se realiza cada 3 meses antes de que ocurra una falla en el equipo de computo para prevenir errores. Involucra limpiar el exterior e interior del equipo usando materiales como desarmadores, alcohol isopropílico y aire comprimido. Proporciona beneficios como un conocimiento del estado del equipo, un funcionamiento seguro y control de software.