El minimalismo surgió en Estados Unidos a mediados de los años 1960 como una reacción contra el expresionismo abstracto, alcanzando su máximo desarrollo en los años 1970. Se caracteriza por reducir lo esencial y eliminar elementos sobrantes, usando colores constantes para no desviar la atención de la obra como un todo. Algunos de los principales exponentes fueron Frank Stella, Joe Baer y Brice Marden.