Este documento discute que no existe una línea clara entre conductas normales y anormales, y que depende del contexto y del juicio clínico determinar si una conducta es anormal o no. También menciona que los trastornos mentales existen en dimensiones y no son categorías definidas, y que cuanto más precisos sean los criterios, menos dependerá la clasificación del juicio subjetivo. Finalmente, resalta que la noción de "enfermedad mental" es un concepto médico que se ha extendido a toda la sociedad pero que, seg