El número ocho simboliza la renovación y los nuevos comienzos. Representa pasar de una obra completa a algo nuevo, como las ocho personas que pasaron a través del diluvio hacia un mundo regenerado, o el octavo día como símbolo de resurrección y volver a vivir. El número ocho también está asociado con la renovación del corazón, el espíritu, las cosas y las personas.