El café es originario de Etiopía, donde se empezó a consumir hace más de 1000 años, aunque mucha gente cree erróneamente que proviene de América. No llegó a Europa hasta el siglo XVI y a América a principios del siglo XVIII, después de haberse consumido en Etiopía y otras regiones desde el siglo X, cuando un pastor descubrió por casualidad sus efectos estimulantes al observar a sus cabras después de comer los frutos del cafeto.