El documento describe la sociedad y economía del siglo XVIII en Europa. La sociedad estaba dividida en tres grupos: la nobleza y el clero eran privilegiados mientras que los campesinos y la emergente burguesía no lo eran. La economía era principalmente agrícola pero el comercio creció gracias al descubrimiento de nuevas rutas. La mayoría de la población se dedicaba a la agricultura y la ganadería para subsistir, mientras que la nobleza controlaba la tierra y los gremios controlaban la producción.