El documento resume el menú escolar de un día, que incluye una ensaladilla rusa como primer plato, lenguado frito con tomate y lechuga como segundo plato, y yogur natural como postre. El menú cumple con las pautas nutricionales recomendadas y los niños también comen fruta a media mañana los martes y jueves. El autor considera que el menú es adecuado aunque podría mejorarse añadiendo una pieza de fruta al postre.