1. La regla del octeto establece que los átomos de los elementos se enlazan unos a otros en el intento
de completar su capa de valencia (ultima capa de la electrosfera).
La denominación “regla del octeto” surgió en razón de la cantidad establecida de electrones para la
estabilidad de un elemento, o sea, el átomo queda estable cuando presenta en su capa de valencia
8 electrones.
Para alcanzar tal estabilidad sugerida por la regla del octeto, cada elemento precisa ganar o perder
(compartir) electrones en los enlaces químicos, de esa forma ellos adquieren ocho electrones en la
capa de valencia.
Por ejemplo tenemos:
Veamos que los átomos de oxígeno se enlazan para alcanzar la estabilidad sugerida por la regla del
octeto. Los diferentes colores de electrosfera mostrados en la figura nos ayudan a interpretar lo
siguiente:
1 – Átomos de Oxigeno poseen seis electrones en la capa de valencia (anillo externo en la figura)
2 – Para volverse estables precisan contar con ocho electrones. ¿Y como lo logran entonces?
Comparten dos electrones (indicado en la unión de los dos anillos), formando una molécula de gas
oxígeno (O2)
La justificativa para esta regla es que las moléculas o iones, tienden a ser más estables cuando la
capa de electrones externa de cada uno de sus átomos está llena con ocho electrones (configuración
de un gas noble).
Es por ello que los elementos tienden siempre a
formar enlaces en la busqueda de tal estabilidad.
Excepciones a la regla del Octeto
Berilio (Be)
Es una excepción a la regla del Octeto porque es
capaz de formar compuestos con dos enlaces
simples, siendo así, se estabiliza con apenas
cuatro electrones en la capa de valencia.
2. El químico estadounidense Lewis dio una definición acerca del comportamiento de
los ácidos y de las bases. Según esta, una base sería una especie que puede donar
un par de electrones, y un ácido la que los puede aceptar.
El ácido debe tener su octeto de electrones incompleto y la base debe tener algún
par de electrones solitario. El amoníaco es una base de Lewis típica y el trifluoruro
de boro un ácido de Lewis típico. La reacción de un ácido con una base de Lewis
da como resultado un compuesto de adición. Los ácidos de Lewis tales como el
tricloruro de aluminio, el trifluoruro de boro, el cloruro estánnico, el cloruro de cinc y
el cloruro de hierro (III) son catalizadores sumamente importantes de ciertas
reacciones orgánicas.
De esta forma se incluyen sustancias que se comportan como ácidos pero no
cumplen la definición de Brønsted y Lowry, y suelen ser denominadas ácidos de
Lewis. Puesto que el protón, según esta definición, es un ácido de Lewis (tiene vacío
el orbital 1s, en donde "alojar" el par de electrones), todos los ácidos de Brønsted-
Lowry son también ácidos de Lewis: