El tema de la adolescencia y sus sentimientos es aprovechado por las series de televisión, que en su afán de rating distorsionan la realidad de lo que es este período de la vida, enfatizando el hedonismo.
1. Reflexiones sobre la serie Élite
Benjamín Núñez Vega
36 años de experiencia
Oficina en Jardines de Moravia, Costa Rica
Tel. 83928897
Élite es una producción española que distribuye Netflix. Narra la
vida de los adolescentes que pertenecen a una institución privada llamada
“Las Encinas”, y hasta el momento tiene cuatro temporadas, del 2018 al 2021. Son
programas de 45 minutos son ampliamente difundidos a nivel mundial. Se
comentarán algunos aspectos y valoraciones sobre sus tramas y argumentos.
Principales problemáticas que se presentan en la serie
“Élite” y la influencia que genera en la percepción social de los
jóvenes
Se puede decir que la base argumental de la serie es el sexo y las intrigas
entre adolescentes que acuden a una institución privada que como dice su nombre
es de “Élite” por el dinero que los padres pagan, con excepción de algunos
estudiantes becados que son más pobres. Como parte de las intrigas y las malas
decisiones se cometen una serie de asesinatos y desapariciones que la policía
investiga con lo que se vincula con el este género y del de misterio.
Entonces lo que predomina es el dinero, jóvenes egoístas y narcisista, que
viven más en residencias y lugares donde realizan fiestas y tiene excesos, que en la
institución educativa en sí misma. Es decir, no solo por el tiempo de exposición, sino
por los argumentos se nota que no se dedica mucho tiempo a estudiar.
Por lo tanto, puede decirse que esta problemática, donde se vive la intriga y
la venganza, pueden estar un poco alejadas de la realidad de la mayoría de los
adolescentes. Es cierto que por su proceso de maduración cognitiva y emocional lo
2. jóvenes pueden tomar malas decisiones, pero no se tiene una obsesión con el daño,
ni con crear conspiraciones.
Pero como se puede constatar, básicamente el atractivo de la serie se basa
en eso, en la toma de malas decisiones que causan morbo. Lo mismo se produce
cuando en un show se descubre una persona infiel, o un supuesto programa de
telerrealidad expone una hija que desea quitarle la empresa a sus padres.
Son sucesos poco comunes, pero despiertan en las personas posiciones a
favor o en contra, y esto desata una serie de sentimientos que crean la necesidad
psicológica de ver más capítulos, de buscar cómo se reproducen esas sensaciones
en otros planos. Además, permite comparaciones con otras series de cierto parecido
como Riverdale, es decir, existe un grupo con tendencia ver este tipo de género,
sobre todo por streaming.
Claro que en una serie de este tipo existen los grupos de amistades, pero los
mismos lo hacen conveniencia, e incluso las figuras de autoridad como el director
de la institución son cuestionadas. Dentro de una forma y un encuadre que se puede
alabar como altamente elaborado, no se pretende una filosofía de vida ni un mensaje
transcendental, pero obviamente están implica valores contrarios a la solidaridad, el
apoyo y la entrega, dentro de diálogos que más parecen de personas maduras que
de adolescentes (de hecho, los actores son mayores de edad).
La percepción de los jóvenes respecto a Élite es dividida, Unos la apoyan
porque las intrigan los emocionan, lo ven y quieren saber más de la historia de los
personajes de las rupturas y uniones, y secretamente les gustaría una vida de placer
y de lujos sin carencias materiales como las que ven en cada episodio. Este grupo
de menores puede decir que se ve la serie críticamente, pero en el fondo existe un
consenso respecto de que estas situaciones se pueden tolerar, sobre todo la riqueza
ilegal, corrupción y asesinatos pasionales de personas prominentes en el mundo
real.
3. Las otras percepciones giran en torno al rechazo precisamente por las mismas
situaciones y el mismo mensaje individualista de lujos y de excesos, se pone que
existe algo más que eso, afirman que la vida debe girar alrededor de lo que se quiere
como seres humanos, un proyecto que conduzca a una felicidad plena más allá del
bienestar inmediato. Además, enfatizan que son diálogos y actitudes más propias de
los adultos que personas menores de edad.
Lo que sí es evidente es que volverse un “fan” de una serie de televisión como
esta para un adolescente tiene una serie de implicaciones evidentes. La primera es
que son como se dijo personas que se están formando moralmente y en sus
relaciones con su familia, amigos y la comunidad. Estar expuesto a este tipo de
situaciones y luego compartirlas en las redes sociales a corto y sobre todo mediano
plazo pueda llevar a cambiar de forma inconsciente cierto tipo de pensamientos y
conductas. Debe recordarse que las redes sociales refuerzan discursos y creencias
que polarizan, la persona recibe mensajes o muy a favor o muy en contra y esto
crea confusiones y distorsiones.
La transmisión del mensaje en la formación adolescente
Debe recordarse la postura de que el medio influye en el mensaje. Las series
buscan captar audiencias, y las situaciones normales a veces resultan aburridas,
insulsas, y las personas le ponen poca atención. Las empresas saben que a los
adolescentes les atrae el sexo y las situaciones románticas, cuya diferencia no
distinguen claramente, y lo complementan con el género policial que mezcla
elementos de asesinatos, otro elemento que es llamativo.
La solución lógica, por lo tanto, serie hacer otro tipo de series que brinden un
panorama más integral de los adolescentes, más centrado en las clases, en las
relaciones con los padres, y las angustias y los temores de su crecimiento, pero sin
tanta violencia, hedonismo, y valoración de la riqueza excesiva como algo tan
conveniente.
4. Pero esto al bajar audiencias, también afecta los ingresos de la empresa (en
el caso del streaming por los adolescentes que usan el servicio). De esta manera
tratar que Netflix y otras empresas hagan una serie de cambios sobre los contenidos
y los valores en las series que contratan y transmiten es difícil.
La otra opción como siempre se ha sostenido es la educación. En este caso
los padres en conjunto con los maestros deben guiar sobre lo que dicen estás series,
más que prohibir que sean vistas (hoy en día eso es casi imposible con las facilidades
tecnologías). Hablar de los programas, escuchar las inquietudes de sus hijos y
responderles, decirles que básicamente toda decisión tiene consecuencias, y que un
mundo de fantasías no debe confundirse con la realidad.
Pero también existe algo muy cierto y que los adolescentes se sienten
atrapados en ese mundo en la edad adulta es natural, y sobre todo cuando tienen
múltiples exigencias en una sociedad que enfrenta tantos desafíos, cambio climático,
crimen organizado, pobreza entre otros. No se pueden pretender decirles a los
jóvenes que existe un mundo perfecto, y lo adecuado es que la sociedad y entre
ellos los medios masivos y tecnológicos dediquen un espacio a tratar estos
problemas.
Referencias
Gaete, V. (2012). Desarrollo psicosocial del adolescente. Rev. chil. pediatr. vol.86
no.6 Santiago dic. 2015.
https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0370-
41062015000600010
Gilmore, K, y Meersand, P. (2014). El librito del desarrollo del niño y del adolescente.
Inglaterra: Oxford University Press.