Las religiones tradicionales o primitivas se encuentran en culturas invadidas por Occidente y afirman la existencia de fuerzas misteriosas como Maná o Gran Manitú. Algunos elementos comunes son el animismo, que atribuye espíritus a la naturaleza; el fetichismo, que adora objetos con espíritus; y el totemismo, donde los clanes se identifican con un animal ancestral.