El documento compara las obligaciones en la época romana y la época actual. En la época romana, las obligaciones se establecían a través de los templos, municipios o el pretor, mientras que en la actualidad se rigen por leyes. Otras diferencias incluyen que en Roma las obligaciones podían ser condicionales, facultativas o a plazo, y existían obligaciones mancomunadas y alternativas. La obligación es condicional si depende de un acontecimiento futuro e incierto.