El aparato reproductor masculino se encarga de producir y transportar los espermatozoides. Está formado por los testículos, que producen los espermatozoides, el epidídimo y el conducto deferente, que almacenan y transportan los espermatozoides, la próstata y las vesículas seminales, que producen los fluidos seminales, y la uretra, por la que salen los espermatozoides durante la eyaculación.