El documento propone el desafío de utilizar recursos de la Web 2.0 para integrar a los mayores y educar a los jóvenes. Detalla actuaciones como crear una escuela de padres, colaborar con centros educativos para mejorar las capacidades cognitivas, fomentar el uso de las TIC como herramienta de trabajo e inculcar valores, y motivar la participación en redes sociales y la publicación de contenidos. También incluye informar sobre herramientas adaptadas y elaborar material accesible para personas con discapacidades.