El humo del tabaco contiene miles de sustancias químicas tóxicas y cancerígenas que pueden afectar negativamente el desarrollo del feto. La exposición al humo del tabaco durante el embarazo aumenta el riesgo de nacimientos prematuros y de bajo peso, defectos congénitos, complicaciones del embarazo como abortos espontáneos, y enfermedades en los niños como asma y cáncer. Para proteger la salud del feto, es importante que las madres dejen de fumar desde el