El telescopio fue inventado a principios del siglo XVII por Hans Lippershey en Holanda. Galileo Galilei mejoró el diseño del telescopio y lo utilizó para realizar importantes descubrimientos astronómicos como los satélites de Júpiter. Existen tres tipos principales de telescopios: refractores, reflectores y catadióptricos, que usan lentes, espejos o una combinación de ambos para observar objetos celestes de manera ampliada.