Este documento describe las características de un territorio socialmente responsable y propone enfoques para lograrlo. Un territorio socialmente responsable busca equilibrar lo económico, social, ambiental y cultural para mejorar la calidad de vida de forma participativa. Se necesita voluntad política, ciudadanía activa y agentes comprometidos. Los enfoques incluyen economía solidaria, transición a modos de vida sostenibles, inclusión, perspectiva de género e interconexión entre territorios responsables.