El proceso es una serie de actos realizados por el Estado, las partes involucradas en una controversia y otros sujetos relacionados pero no directamente vinculados al litigio. Estos actos se enlazan y son evaluados por el órgano jurisdiccional para emitir una sentencia que resuelva la controversia. El proceso incluye las acciones del demandante y demandado, así como los actos realizados por la autoridad en el ejercicio de su jurisdicción y las funciones de terceros ajenos a la controversia pero relacionados con el pleito.