Este documento describe la tipificación de conductas delictivas en el derecho penal. Explica que las leyes deben describir con precisión las figuras delictivas para que los casos concretos puedan adecuarse a ellas. También destaca que la seguridad jurídica requiere que exista una ley anterior al hecho que califique la conducta como punible. Finalmente, resume los tres elementos de un tipo penal: subjetivos como la culpabilidad, objetivos que se refieren a las acciones delictivas, y normativos que complementan los elementos objetivos.