El documento describe dos tipos de nutrición: autótrofa, en la que los seres vivos producen su propio alimento a través de procesos como la fotosíntesis, y heterótrofa, en la que los seres vivos se alimentan de sustancias orgánicas producidas por otros. La fotosíntesis es el proceso mediante el cual las plantas convierten la energía solar, el agua y el dióxido de carbono en glucosa para obtener energía y fabricar celulosa.