2. FRUTAS SIEMPRE FRESCAS
Si vas a colocar fruta fresca en tus postres, lo
mejor es rociarla con una gota de limón
para mantener la coloración más viva. En caso
de que necesites muy poco zumo, agujera el limón,
el jugo saldrá por allí y no estropearás el limón
entero.
3. ENGRASAR LOS MOLDES CON MANTECA
La costumbre es engrasar los moldes con
mantequilla y harina pero el inconveniente está en
la delgada capa harinosa que queda en el pastel,
además de que no siempre se despegan con
facilidad. Intenta usar manteca en vez de
mantequilla y será mucho más sencillo.
4. MERENGUE CASERO
Para hacerlo sólo debes batir las claras a punto
de nieve hasta que adquieran cierta firmeza, luego
basta agregar azúcar y terminar el merengue
mezclando muy bien.
5. HUEVOS SIEMPRE FRESCOS
Cada que tengas que agregar un huevo a una
mezcla rómpelo en un recipiente aparte, de esta
forma si está en mal estado no contaminará el
resto y será más fácil encontrar las cáscaras si
alguna se cae.
6. CAPAS DE CHOCOLATE PERFECTAS
Para que las capas de chocolate no se mezclen
entre ellas cuando viertas una capa sobre otra,
coloca la parte posterior de una cuchara y deja
caer el chocolate, de modo que rebote y no caiga
directamente sobre la capa anterior.
7. PASTELES FIRMES
Para crear un pastel firme que aguante un betún
pesado o el fondant, debes quitar por cada tres
tazas de harina tres cucharaditas de la misma
y sustituirlas por tres de maicena. De esta forma
el pastel no se hundirá y podrás adornarlo como
quieras.
8. APROVECHA LA CREMA BATIDA
Al montar la crema batida es muy común que
batamos en exceso, lo que separa la grasa y el
suero. Si esto sucede, no tires la crema ya que una
vez que elimines la grasa quedará una
mantequilla casera que enriquecerá cualquier
postre.
9. PASTA QUEBRADA COMPACTA
Métela al refrigerador para que se mantenga
compacta y sea más sencillo utilizarla y moldearla.