El carpintero Gepeto construyó un muñeco de madera llamado Pinocho. Una noche, el Hada Azul cobró vida a Pinocho y le dijo que podría convertirse en un niño de verdad si era honesto y generoso. Pinocho comenzó a vivir con Gepeto, pero luego se fue con un titiritero y terminó encerrado en una jaula, de donde el Hada Azul lo rescató después de que Pinocho admitió la verdad sobre cómo llegó allí.